Jahaira Paola Buñay Cantos a; Jannina
Alexandra Montalvan Espinoza b; Sonia
Elizabeth
Vizueta León
c
Administración tradicional
vs el Toyotismo: Una
formula efectiva para las PyMES
Revista Científica
Mundo de la Investigación
y el Conocimiento. Vol.
2 núm.,
1, febrero, ISSN: 2588-073X, 2018,
pp. 464-487
DOI: 10.26820/recimundo/2.1.2018.464-487
Editorial Saberes del
Conocimiento
Recibido: 05/12/2017 Aceptado:
10/02/2018
a. Universidad de Guayaquil; jahaira.bunayca@ug.edu.ec
b. Universidad de Guayaquil; jannina.montalvanes@ug.com.ec
c. Universidad de Guayaquil; svizueta@ug.edu.ec
RESUMEN
Las empresas en la actualidad requieren de personal altamente capacitado para lograr el éxito pretendido, principalmente
de la posesión de
un líder bien preparado en el ámbito
de los negocios, que
tenga
la capacidad
de dirigir la organización. Los administradores
son las personas idóneas para realizar esta clase de actividades y
buscar el logro de los objetivos organizacionales. Se
llevó a
cabo una investigación
documental la cual permitió establecer una comparación entre
el
enfoque tradicional de administración versus el Toyotismo como una nueva tendencia integral en materia de
administración de recursos para que así una PyMES se desempeñe exitosamente en el mundo global actual
y futuro.
Dicha investigación está basada en libros del área, los cuales dan sustento al
tema desarrollado con ayuda de citas bibliográficas de
los autores consultados; así como
en internet como fuente
de
soporte.
Palabras claves: Administración, taylorismo, fordismo,
toyotismo, PyMES.
ABSTRACT
Companies currently require highly trained personnel to achieve
the intended success, mainly the
possession of a well-prepared leader in the field of business, who has the ability to lead the
organization. The administrators are the ideal people to carry out this kind of activities and look
for the achievement of the organizational objectives. A documentary research was carried out
which allowed
us to
establish a comparison between the traditional management approach versus
Toyotism as a new integral trend in the administration
of resources so that a SME can perform
successfully in the current and future global world. This research is based on books from the area, which give support
to the theme developed
with the help of bibliographic citations of the
authors consulted; as well as
on the internet as
a source of
support.
Keywords: Administration, Taylorism, Fordism, Toyotism, PyMES.
Introducción.
Una organización simboliza un factor clave en materia de generación de riqueza con la
que cuenta una sociedad; lo cual permite el desarrollo económico y por consiguiente acceso a
aspectos de bienestar para una comunidad. Desde el punto de
vista tradicional, la empresa es
considerada
una entidad que
organiza con
eficiencia los factores económicos, produciendo
bienes o servicios para satisfacer las necesidades del mercado y con ánimo de alcanzar ciertos
objetivos, entre ellos el lucro y para alcanzar tales objetivos se debe contar con una administración
eficiente de los
recursos con los que cuenta
dicha empresa.
Es por ello que la administración consiste en darle
forma, de manera consistente y constante a
las organizaciones, por medio del cumplimiento de
metas
que a su vez deben estar
alineadas al plan estratégico que desee alcanzar la empresa y bajo un nuevo esquema que incluye
a los
trabajadores
en ese
proceso
de
alineación constante y
evaluación del
entorno, para establecer procesos flexibles que no impacten de manera
negativa en la producción de un bien. Siendo
todo lo anterior la
base que impulsa la creación de un estudio bibliográfico que permita analizar groso
modo la evolución de los enfoques de la administración desde
su método más convencional hasta las nuevas tendencias que se han venido aplicado en los últimos tiempos para optimizar
procesos productivos, relaciones laborales, así como aspectos de comercialización y finanza y
como un nuevo método de trabajado puede apoyar en los procesos de creación de plusvalor
en una compañía
pese a lo pequeña que pueda ser.
Metodología y métodos
Antecedentes
Las
organizaciones
en su dimensión de entes económicos y
sociales son la base fundamental en donde se
ve reflejado el crecimiento sostenido de
una nación y por ende
representa
el
progreso de una
sociedad no solo en materia de riqueza, sino también de desarrollo
de competencias técnicas, formación académica, reforzamiento o mejoramiento del sistema de
valores de los ciudadanos, optimización de la productividad y evolución de un país en términos integrales, pero
para que lo previamente mencionado tenga
cabida las empresas deben contar con personas (trabajadores) que desempeñen una labor y a su vez con “un administrador” que se encargue
de darle un uso óptimo a todos los recursos (económicos, financieros, técnicos, humanos, entre otros)
para así lograr alcanzar los objetivos
de rentabilidad para los accionistas
de una empresa. En este sentido, la administración juega un papel indispensable y vital, pues es el eje
conductor que articula
todas las aristas que componen a una organización, los recursos
con
los que cuenta y da respuesta directa a la gestión del conocimiento que genera plusvalor y en consecuencia
capitalización
de una compañía.
La práctica administrativa contempla principalmente el negocio, pero su
campo de acción no se limita exclusivamente
en
generar rentabilidad en una empresa, al ser
una competencia exclusivamente humana, ésta se manifiesta en aspectos sociales, políticos, deportivo, religioso,
doméstico, etc. De allí la importancia de
visualizar a la administración como una actividad
universal, e indistintamente de
su área
de ejecución, las personas que integran una
organización
(bien sea política, religiosa, lucrativa o de otra índole) deben trabajar en equipo en aras de alcanzar metas comunes, pero esto hace que dependiendo del administrador a cargo se establezcan matices en la ejecución de utilización de los recursos.
Es por ello que se hace vital definir el significado de la administración y su campo de acción, tarea nada
sencilla, debido a
que unos autores la entienden como una
propiedad exclusiva
de la empresa, otros la asumen como un proceso inherente a sus funciones en una
organización,
otros la consideran una ciencia, técnica
o incluso un arte;
siendo todas estas aproximaciones
valederas, ya que en su momento dieron respuesta a un determinado momento de la sociedad y
del
tiempo en el cual se vivía, de allí que surjan tantos conceptos y enfoques, orientados
al manejo eficiente de recursos, a medir tiempo para mejorar la productividad, establecer por medio
de la repetición de actividades el condicionamiento de
Pávlov en pro
de alcanzar la efectividad y
eficiencia en los procesos ejecutados,
y bajo las nuevas tendencias propiciar valor agregado a través de la gestión del
conocimiento,
por medio de procesos racionales y nada autómatas.
Al
ser la administración una actividad
única y producto
del ser humano, la misma tiende a ser manipulada por los rasgos y personalidad de quien la genera, por lo tanto, en ocasiones puede
manifestarse como un concepto de arte, utilizando técnicas de motivación y liderazgo. Sin
embargo, etimológicamente
el origen de la palabra administración
se
forma del prefijo ad.,
hacia,
y con ministrato, que proviene de minister, vocablo compuesto de minus, comparativo de inferioridad, y
sufijo ter, que funge como termino de comparación. Por lo cual se puede concluir
que minister a diferencia de magister (comparativo de superioridad)
refleja un estado de
inferioridad, subordinación y obediencia, por lo cual ad–ministrare, significa “prestar un servicio
bajo el mando de otro”
(Chiavenato, 2001)
En
virtud de lo anterior
se puede
definir en términos
propios que la administración representa la actividad humana cuyo objetivo radica
en
lograr de forma eficiente la
utilización de los recursos con los que cuenta la organización en pro de alcanzar de forma satisfactoria los
objetivos de la empresa (capitalización y
mayor rentabilidad) como de los individuos que
coexisten en
dicha institución.
En general, existen dos tipos de administración:
la pública, que se refiere a la actividad
gubernamental o del Estado, y tiene el propósito alcanzar sus objetivos para beneficio del país; y la privada, referente al sector privado (una empresa), cuyo fin es lograr un beneficio para asegurar su permanencia y su crecimiento. Para efectos de este estudio analítico y bibliográfico,
el enfoque se dará únicamente en términos del
sector
privado.
Algunas
definiciones
· Según (Ponce, 1992) señala algunos conceptos de otros autores referente al enfoque que
estos le dan a la administración, los
cuales
se mencionan a continuación:
· E.F.L. Brech:
Es un proceso social que lleva consigo la responsabilidad de planear y regular en forma eficiente las operaciones de una empresa, para
lograr un propósito dado.
· Henry
Fayol:
Administrar
es prever, organizar, mandar,
coordinar
y
controlar.
· José
Antonio
Fernández Arena:
Es
la
ciencia social
que persigue la
satisfacción de objetivo instituciones por medio de la estructura y
del esfuerzo humano coordinado.
· W. Jimenez Castro: Es una ciencia compuesta de principios, técnicas y prácticas cuya aplicación a conjuntos humanos
permite establecer sistemas racionales de
esfuerzos cooperativos, a través de los cuales se puede alcanzar propósitos
comunes
que individualmente no se puede lograr.
· Koontz y O´Donnell:
Es
la
dirección de
un
organismo
social, y su
efectividad en
alcanzar sus objetivos, fundada y habilidad
de conducir a sus
integrantes.
· J.D Mooney: Es el arte o técnica de dirigir e inspirar a los demás, con base
en un producto y claro
conocimiento
de la naturaleza humana.
· Peterson y Plowman: Una técnica por medio de la cual se determinan, clarifican y realizan los propósitos y objetivos de un grupo humano particular.
· F. Tanneanbaum:
El
empleo de la autoridad para
organizar,
dirigir
y
controlar subordinados responsables, con el fin de que todos los servicios
que se presentan san debidamente
coordinados en el logro del fin
de la
empresa.
· George Terry: Consiste
en lograr un objetivo predeterminado mediante el esfuerzo ajeno". (p.68).
Administración
tradicional
El enfoque de
la administración tradicional se fundamenta en lo que hoy día se conoce
como administración científica, la cual se basa en una confluencia de
elementos
que no existían en la antigüedad, ya que implica la coexistencia de valoración y manejo de conocimientos técnicos y leyes que afectan directamente a la organización, análisis del entorno, establecimiento
y clasificación de competencias, reorientación de recursos, agrupados todos estos bajo un mismo escenario laboral, de forma tal de
constituir la coordinación de los recursos en una ciencia que viene
acompañada de un cambio de actitud recíproca de los trabajadores y de la alta gerencia; pues es el resultado de la división del trabajo y
establecimiento de roles claros entre los actores
que hacen vida dentro
de la
empresa para que la misma alcance sus objetivos.
De
acuerdo a (Chiavenato,
2001)
Taylor
es el
fundador del movimiento conocido
como organización científica del trabajo. El
pensamiento que
lo guía es la eliminación de las
pérdidas de tiempo, de dinero, etc., mediante un método
científico. Afirma que
"el principal
objetivo de la administración debe ser asegurar el máximo de prosperidad, tanto para el empleador
como para el empleado".
Para el empleador,
el
máximo de prosperidad no significa la
obtención de grandes beneficios a corto plazo, sino el desarrollo de todos los aspectos de la empresa para
alcanzar un nivel de prosperidad. Para el empleado, el máximo de prosperidad no significa obtener grandes salarios de
inmediato, sino
un
desarrollo personal para trabajar eficazmente, con calidad y utilizando sus dones personales. Taylor (Chiavenato, 2001) hace una distinción entre producción y productividad: "la máxima prosperidad es el resultado de la máxima productividad que, depende del entrenamiento de cada uno". Consciente de la oposición entre obreros y empleadores, da la siguiente explicación:
· Existe una falsa
creencia, de que un
aumento de la producción traerá el desempleo,
· Algunos malos sistemas de
administración obligan al obrero a limitar su producción
para proteger sus intereses pues, cuando él aumenta su ritmo de trabajo, el patrón se las arregla para no
aumentarle su salario,
· Hay métodos de
trabajo desastrosos
que desperdician los esfuerzos de los obreros que
reciben
poca ayuda y pocos consejos por parte de la dirección.
El objetivo
de la organización científica del trabajo (OCT) es derribar esos obstáculos y descubrir los métodos más eficaces para realizar una tarea y dirigir a los obreros: la "cooperación
estrecha, íntima, personal, entre la administración y
los obreros es la esencia misma de la OCT".
"Lo que los trabajadores piden a sus empleadores es un salario elevado, y lo que los empleadores
desean son bajos costos de producción la existencia o la ausencia de estos 2 elementos constituye el
mejor
indicio de una buena o
de una mala administración".(p.128)
Taylor
de acuerdo a (McGregor, 1960) enunció 4 principios de administración
científica:
1. Estudio científico del trabajo, debe ser realizado por un equipo de especialistas;
ese
estudio dará lugar a la creación de una oficina o servicio de métodos de trabajo. Se definirán los procesos operativos más económicos y se establecerá la cantidad de trabajo que debe realizar un obrero colocado en condiciones óptimas; si el obrero obtiene esa cantidad
deberá percibir
un salario muy alto.
2. Selección científica
y
entrenamiento
obrero. Taylor
recomienda una
selección sistemática según las aptitudes y estima que,
cualquier trabajador
puede
resultar excelente
para por lo menos
un puesto de trabajo.
3. Unión del estudio científico del trabajo y de la selección científica del trabajador, "se trata de que los obreros apliquen
la ciencia" y es allí donde fracasan muchos dirigentes y
no los obreros, porque los primeros
no quieren cambiar
sus métodos,
4. Cooperación entre los dirigentes y los obreros; "el trabajo y la responsabilidad del
trabajo se dividen de manera casi igual entre dirigentes y obreros". (p.128)
Nuevas tendencias
Luego de años de evolución
y superada la revolución industrial queda instaurada la filosofía de Taylor y el fordismo, que no es más que un sistema socioeconómico basado en
la producción industrial en serie. De acuerdo a (Chiavenato, 2001) Muchos estudiosos afirman
que gran parte
de los problemas se debe a las
ingeniosas soluciones acuñadas a comienzos del siglo XX por dos ilustres estadounidenses, Frederic Taylor y
Henry Ford, las cuales garantizaron
con
éxito la producción industrial masificada. Taylor fue el creador de
lo
que se convirtió en administración científica, un ordenamiento de los tiempos y ritmos
en el proceso productivo.
Con Taylor escéptico o frente a la
eficiencia espontánea
de los trabajadores, cuya indolencia es
sistemática surgió la separación definitiva entre planeación, concepción y dirección del trabajo-que corresponde a la empresa y sus departamentos-, de la ejecución sencilla -que corresponde a los trabajadores-. El hombre gregario que debe obediencia a los instructores era el tipo ideal de obrero para Taylor. Esta concepción que era compartida por Ford, empresario convencido de la necesidad de precisión absoluta en la fabricación, quién afirmaba que “para ciertos hombres, la reproducción continua de una operación idéntica constituye una tarea horrible; para la mayoría, la repetición nada tiene de desagradable porque en muchos casos, la obligación de pensar es una verdadera tortura. Preocupado por la situación y tomando como modelo el transporte elevado en los mataderos de Chicago. Ford creó la primera línea de montaje en 1913 al introducir bandas transportadoras en su fábrica. Fue tal la subdivisión de tareas en el montaje de motores que nada menos que 85 obreros se encargaban de ejecutar el trabajo diseñado antes para un solo empleado. (p.51)
La diferencia
del
Fordismo con el taylorismo, es que
lograron los
objetivos no a costa
del trabajador, sino que a través de
una estrategia
de expansión del mercado. (Coriat, 1991). Sin embargo, de acuerdo a (Soteldo &
al,
2005) el enfoque de la gestión del conocimiento
recientemente
ha resurgido como
una perspectiva dominante
que puede ser
utilizada para
explicar las dinámicas competitivas de los entornos cambiantes de
la década de
los noventas. Dicha perspectiva basada en los recursos ve a la empresa como un portafolio de competencias, las
cuales son la fuente de
ventajas competitivas sostenibles que
residen en las competencias distintivas y
en
su habilidad para obtener beneficios de las mismas (Foss NJ, 1995). De acuerdo con (Porter,
How information gives you competitive advantage, 1985) es a través de
la dirección estratégica que se puede pasar de una orientación producto-mercado, a un contexto en el cual las empresas operen en entornos globales y donde se acelera el cambio tecnológico. En este nuevo contexto el enfoque producto-mercado encuentra limitaciones prácticas, por lo que actualmente existe un interés hacia los recursos internos de la propia empresa, específicamente hacia los recursos humanos. (Soteldo & al, 2005) señala que:
Así pues, el enfoque basado en los recursos
y capacidades sugiere que los
recursos que posee
una empresa son
más importantes que la manera
en
que está estructurada la industria
a la que pertenece
(Schendel, 1994). Para este
enfoque estratégico, la ventaja competitiva de la empresa puede ser obtenida
a través de las formas en que la organización configure y
administre sus recursos internos que, cada vez más, serán una mayor fuente de
ventaja-
diferencia entre las
empresas. Según este enfoque, los diferentes desempeños en la empresa son el resultado de diferencias en la
eficiencia, más
que diferencias en el poder de mercado. Es así como, el conocimiento puede
ser
una fuente de ventaja competitiva sostenible y
se fundamenta en dos
propiedades importantes: primera, que
está basado en la experiencia
acumulada más que en la
tarea o rutina organizativa, lo cual implica
que contiene una gran cantidad de
conocimiento tácito, lo que dificulta tanto
su transferencia como su imitación por
parte de los competidores; segunda, que
no radica únicamente en los individuos,
sino en la forma en que estos interactúan entre sí, es decir, el “capital social”, el cual resulta del trabajo en equipo en el que sus miembros poseen diferentes recursos de la organización (Foss, Knuden y Montgomery, 1995). (p.31)
Dados los avances de la ciencia en todos los aspectos en los últimos
20 años, resurge
un nombre que ha
sido
ícono en
el mundo automotriz
y ahora se ve
reflejado
en las nuevas
tendencias administrativas del mundo modernos para
cualquier empresa indistintamente de
su tamaño, y es replicada su filosofía a nivel mundial, llamada el Toyotismo. Este nuevo enfoque de
administración se produce en un momento en el cual el sistema capitalista buscaba cambios en
sus procesos productivos, pues se encontraba en crisis, de allí nace lo que hoy día se entiende
como neoliberalismo cuyos
principios son:
· Estado mínimo de existencia de mercancía, no se busca sobre ofertar productos, sino ajustarlo
a la demanda del mercado.
· Libre iniciativa
tanto del empresariado como de los empleados, principalmente se auspicia la iniciativa en los niveles bajos de gerencia y cadenas productivas, en pro de
desarrollar toma de decisiones asertivas y resolución de problemas antes situaciones operativas y/o complejas que no requiera del aporte estratégico de la alta gerencia, pues todos los miembros integrantes de una organización abocan sus esfuerzos en aras
de alcanzar una meta en común.
· Todas las actividades se consideran mercancías De todos los sectores,
el que más sufre
con
los cambios es la clase trabajadora, teniendo alteraciones en su estructura
productiva, sindical y política.
Desde la década de
los 70, es palpable estos procesos de reestructuración para que las
grandes potencias sigan manteniendo altos niveles de competitividad.
En este contexto, se
puede
apreciar el patrón que hizo una reingeniería
desde el punto de vista intelectual, de enfoque
estratégico, de cultura organizacional,
clima laboral, productividad y manejo de recursos, haciéndose merecedores de años de estudio y análisis en muchos países del mundo que hoy días buscan replicar este modelo, quienes apuestan a este enfoque
de negocio especialmente
en
países en crisis
o en vías de desarrollo por lo que comprende y lo que abarca más que un método de
trabajo una filosofía empresarial que se alinea se
termina alineados a la filosofía de vida
de los trabajadores, en donde se aplica este enfoque. Según (Hoffman, 2012) Toyota y
su modelo toyotista. A finales de los años 60, la
compañía japonesa estaba plenamente dentro del modelo de producción flexible. Este modelo divulgado ampliamente dentro y fuera de Japón La ideología y los principios organizativos de este sistema comenzaron a mantener prácticas de negocio como
un modelo de administración, siendo que en la década de 80 el Toyotismo pasó a ser la
ideología
universal de la producción
sistémica del capital.
De
acuerdo a (Hoffman, 2012):
El ingeniero japonés Eiji Toyoda visitó una industria
automotriz en Detroit, dirigida por el sistema
fordista, donde el flujo normal era
producir primero y vender después. Fue entonces que, al evaluar la
estructura de esta empresa, Toyoda se
dio cuenta de que Japón no sería capaz de utilizar
esa
forma de producción. Por lo tanto, fue necesario modificar el sistema americano de producción. Buscando soluciones a este paradigma, Toyoda y su especialista en producción Taichi Ohno, iniciaron un proceso de cambios en la producción. Entre las nuevas técnicas implantadas, se encuentra la posibilidad de modificar máquinas rápidamente durante la producción, ampliando así la variedad de productos en oferta. Esa pasó a ser la esencia del modelo japonés de producción. Algunas reglas fueron implantadas y conforman las características del Toyotismo, partiendo del principio de que aquellos elementos que no agregasen valor al producto debían ser eliminados, como el tiempo perdido por reparaciones o material de desecho producción mayor de lo necesario, o antes del tiempo necesario operaciones innecesarias en el proceso de fabricación, transporte, stock del producto, movimiento humano, entre otros opera sobre la base de estos principios, el modelo de producción fue diseñado por: Automatización, Just-in-time, Trabajo en equipo, Manejo del estrés, Flexibilización de la mano de obra, Gestión participativa, Control de calidad (ISO-9000), tercerización de los aspectos no medulares de la organización que pudiesen disminuir de manera sustancial los costos de producción.
Resultados.
La filosofía
Toyota aporta un nuevo enfoque para las empresas y sus accionistas, quienes
a su
vez
dirigen sus esfuerzos a mantener márgenes aceptables
de
rentabilidad,
en costos operativos
prudentes, pero en especial
se persigue dejar un legado en
la industria, que va más allá de hacer branding (establecimiento
de la marca en el mercado) y crear un vinculo afectivo
de por vida con el trabajador hoy
día es visto como un colaborador en el cumplimento de esa meta en común. Es por ello que se hace prudente presentar un cuadro comparativo entre el enfoque tradicional de la administración y
las nuevas tendencias de estas, donde predomina en la actualidad en modelo toyotista.
Cuadro
N°1.- Comparativo de
tendencias
convencionales vs modernas de la administración.
Fuente: Elaboración
propia, 2018.
Si
se observa posteriormente el detalle de la pequeña y mediana empresa en Ecuador, que
de acuerdo a (Barrera, 2001)
señala
que:
En Ecuador, de acuerdo a su
tamaño, las empresas
tienen las categorías
siguientes:
· Microempresas: emplean hasta 10 trabajadores, y su capital fijo (descontado edificios y terrenos) puede ir
hasta 20 mil dólares.
· Talleres artesanales: se caracterizan por tener una labor manual, con no más de 20 operarios y un capital fijo de 27 mil dólares.
· Pequeña
Industria: puede tener
hasta
50 obreros
· Mediana
Industria: alberga
de 50 a 99 obreros,
y
el capital fijo no debe
sobrepasar de 120 mil
dólares.
· Grandes Empresas: son aquellas que tienen más de 100 trabajadores y 120 mil
dólares en activos
fijos
Características
El
número de empresas y su la participación en la generación de empleo, se resume
así:
Cuadro N° 2.- Empresas PYMES en Ecuador
Fuente: (Barrera,
2001)
Ubicación geográfica: se da una gran concentración en las ciudades de mayor
desarrollo; en Quito y
Guayaquil se asientan el 77% de los establecimientos; en Azuay,
Manabí y Tungurahua el
15%; y el 8% corresponde a 17
provincias.
Las principales
diferencias en el
sector
son:
Cuadro N° 3.- Principales
diferencias de la industria en Ecuador
Fuente: (Barrera,
2001)
· La brecha de la productividad del trabajo entre la pequeña y gran industria se amplía. En 1988 el índice es de 0.876 y en 1990 baja al
0.398.
· Baja productividad
hora/trabajador:
Ecuador
3.25 dólares;
Estados
Unidos 30 dólares;
Colombia entre 10 y 15
dólares.
· La competitividad de las PYMES ecuatorianas en el Grupo Andino es: menor
respecto a
Colombia y Venezuela, y mayor sobre el
resto de países.
Indicadores: La situación actual
de la pequeña industria
se resume a continuación:
· Escaso
nivel tecnológico
· Baja calidad de la producción, ausencia de normas y altos
costos
· Falta de crédito,
con
altos cosos y difícil acceso
· Mano
de obra sin calificación
· Producción
se orienta más al
mercado
interno
· Incipiente
penetración
de
PYMES al mercado internacional
· Ausencia total de políticas y estrategias
para
el desarrollo
del sector
· Son insuficientes los mecanismos de apoyo para el financiamiento, capacitación,
y uso de tecnología
· El marco legal
para el
sector
de la pequeña industria es
obsoleto
Potencialidades: La
pequeña industria
ecuatoriana cuenta con un sin número de potencialidades
que son poco conocidas y aprovechadas.
Principalmente se
refieren
a:
· Son
factores claves para
generar
riqueza y empleo
· Al dinamizar la economía, diluye los problemas y tensiones sociales, y mejorar la
gobernabilidad.
· Requiere menores
costos de inversión
· Es el
factor clave para dinamizar
la economía de regiones y provincias deprimidas
· Es el
sector que mayormente
utiliza insumos y materias primas
nacionales
· Tiene posibilidades de obtener nichos de exportación para bienes no tradicionales generados en
el sector
· El alto valor agregado de su producción contribuye al reparto más equitativo del
ingreso
· Mantiene
alta
capacidad
para proveer
bienes
y
servicios a la gran
industria
(subcontratación)
· Es flexible para asociarse y enfrentar exigencias del mercado (p.1).
En virtud de lo anterior se puede observar que las pequeñas y medianas empresas en el
Ecuador son un motor importante dentro de
la economía de la
nación, que venían con un
porcentaje
de
participación importante dentro
del
PIB del mencionado
país y por
políticas estadas y falta de dinamismo de los empresarios comenzó un proceso de desaceleración que puede revertirse fácilmente. Al ser las PyMES una pieza angular dentro de la generación de
fuentes de empleos y de medición de sostenibilidad de un país, es por lo que cual se invita al
empresariados ecuatoriano a
valerse de cualquier recurso
que les permita optimizar la calidad de
sus productos, los tiempos de entrega y
el
tipo de vínculo laboral que establecen con sus trabajadores, es
por
ello
que
si
solamente el
empresario busca
aplicar nuevos
métodos administrativos que
no requiera de mantener altos niveles de inventario, inversiones mesuradas,
poco personal pero eficiente y flexible para ejecutar diferentes roles dentro de la organización, generando que la competencia y el benchmarking se tras polen a los procesos internos de la empresa, propiciando así mejoramiento en la calidad y adaptabilidad al entorno comercial que
rodea a la organización. Es por ello que se recomienda como una solución la aplicación del toyotismo
en las PyMES de Ecuador.
Entendiendo
que ningún proceso puede darse de manera aislada y sin el apoyo de todos los
factores que confluyen para
que
materialice este esquema de trabajo, lo que incluye al
Gobierno de Ecuador, la cámara de empresarios, el Ministerio de Educación Superior y
los ciudadanos en general, pues esto implica
un cambio no solo en el enfoque
del
negocio de una organización, sino en la restructuración de una filosofía de vida para el ecuatoriano, que fácilmente
se puede convertir en un talento humano digno de
exportación, así como la empresa
donde labora y el
producto que contribuye a fabricar.
Conclusiones.
La administración cumple
con
el objeto de manejar de la forma
más eficiente los recursos de una empresa, entendiendo que dichos recursos pueden ser humanos, financieros, materiales, tecnológicos, de conocimientos o la combinación de todos los aspectos anteriores, entre otros. Sin embargo para cumplir con el fin propuesto por la compañía, la administración debe obedecer
a un
plan estratégico, a través de la ejecución de diversas técnicas y prácticas administrativas que propicien la organización, integración, dirección y control de los recursos para producir el beneficio establecido
por la empresa, que bien
puede ser social o económico,
en
el caso último se debe manifestar en términos monetarios para alcanzar altos niveles de rentabilidad, reflejando así el éxito de la misma. En este sentido, el toyotismo vino para perfeccionar un método buscando solucionar un paradigma: cómo ajustar el sistema de producción a los moldes neoliberales.
Por lo tanto, el Toyotismo representa la forma
eficaz de administrarte ante los cambios de
una forma innovadora y eficiente. Este sistema contempla
al obrero especializado / trabajador
convertido en colaborador dentro
del
proceso productivo bajo un nuevo enfoque de participación y toma de decisiones, ajustable a los cambios del entorno y midiéndose
de acuerdo a los sistemas
de gestión y control de la calidad con la premisa de Just In Time o Justo a tiempo en toda la
cadena de suministro esté integrada verticalmente la empresa o no, es decir, que no se limita exclusivamente al inventario.
Al ser la pequeña y mediana empresa un elemento clave dentro del proceso productivo y
de crecimiento sostenible
de Ecuador, se hace
indispensable que se sume a las nuevas tendencias mundiales, que a su vez le va a permitir expandir su manejo estructural, operativo y financiero,
así
como contribuirá a la optimización y
posible diversidad de los productos que comercialice
la empresa, estableciendo una nueva cultura organizacional, donde el establecimiento de vínculos afectivos con los trabajadores es vital para lograr alcanzar objetivos de rentabilidad y posible exportación
de los productos fabricados a
bajo costo.
Bibliografía.
Barrera, M. (2001). Situación y
Desempeño de las PYMES de Ecuador en el Mercado Internacional . recuperado de: www.aladi.org/nsfaladi/reuniones.nsf/.../$FILE/ecuador.doc.
Chiavenato, I. (2001).
Administración: Teoría, proceso
y
práctica. Mexico: McGraw-Hill
Interamericana S.A.
Coriat, B. (1991). Coriat, B. (1991). El taller y el cronómetro. Ensayo sobre el taylorismo,
el fordismo y la
producción en masa,
S XXI, México.
De freitas Ribeiro, A. (n. ed). Taylorismo, fordismo y toyotismo. recuperado de:
https://revistas.pucsp.br/index.php/ls/article/view/26678.
Escuelapedia.
(n.ed).
Toyotismo. recuperado de: http://www.escuelapedia.com/el-toyotismo/. Foss NJ, K. C. (1995). An exploration of common ground: integrating evolutionary and strategic
theories of the firm.
Recuperado de: https://link.springer.com/chapter/10.1007/978-1-
4615-2201-0_1.
Gramsci,
A. (1973). Americanismo y fordismo. Roma: Riuniti. Hobsbawm, E. (1988). Industria
e imperio. Barcelona: Ariel.
Hoffman, N. (2012). Taylorismo, fordismo y toyotismo. recuperado de:
http://nuevasensenanza.blogspot.com/2012/06/taylorismo-fordismo-y-toyotismo.html. Mayoral, L., & J., T. (2001). Administración de empresas y metodología de investigación :
Aportes para un diálogo y una enseñanza efectivos. recuperado de:
http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=401137445003.
McGregor, D. (1960). El lado humano de las empresas. Mexico. ISBN: 9789701058718: Mc
Graw-Hill Interamericana S.A.
México, U. N. (2003). Administración básica I. Facultad de contaduría y administración.
recuperado de: http://www.itson.mx/publicaciones/pacioli/Documents/no59/administracion_general/vinc
ula_pyme.pdf.
Ponce, A. (1992). Administración moderna. recuperado de: https://books.google.es/books?hl=es&lr=&id=TwnmlLyBJIYC&oi=fnd&pg=PA2&dq=A
ugustin+Ponce&ots=yUoiXPuKEf&sig=6NQbMWSYbzTOwT_4auuLxqGrnvU#v=onep age&q&f=false.
Porter,
M. (1985). How information gives you competitive
advantage. Harvard Business Review. Porter, M. (2017).
El ser
competitivo.
recuperado de: https://www.casadellibro.com/libros-
ebooks/michael-e-porter/62278.
Sonora, I. T. (2013). La Cultura Organizacional en el siglo XXI: Un estudio bibliométrico en Latinoamérica. recuperado de: www.itson.mx.
Soteldo, H., &
al, e. (2005).
Diagnóstico
de las condiciones internas para
la gestión del talento
humano en las Pymes de la región centro-norte del Estado de Sinaloa. recuperado de: http://www.itson.mx/publicaciones/Documents/ciencias-economico/estudiosdeadm.