
6 RECIMUNDO VOL. 8 N°3 (2024)
Introducción
Según Zimmet y colaboradores, la descrip-
ción del síndrome metabólico tuvo lugar
hace más de 80 años, cuando el médico
sueco Kylin definió la asociación entre hi-
pertensión, hiperglucemia y gota. Posterior-
mente, en 1947, Vague publicó un artículo
referente a la asociación entre el fenotipo
de obesidad con la acumulación excesiva
de tejido adiposo en la parte superior del
cuerpo (obesidad de tipo androide) y las al-
teraciones metabólicas de la diabetes tipo
2 y el evento vascular cerebral. Veinte años
después, Avogaro y otros documentaron la
aparición simultánea de obesidad, hiperin-
sulinemia, hipertrigliceridemia e hiperten-
sión arterial. En 1988, Reaven describió la
presencia de un conjunto de alteraciones
metabólicas, cuyo rasgo fisiopatológico
central era la resistencia a la insulina. Deno-
minó ‘síndrome X’ a esta agrupación de in-
tolerancia a la glucosa, hipertensión, hiper-
trigliceridemia y disminución del colesterol
de alta densidad (HDL) (1).
El síndrome metabólico (SM) se define
como la agrupación de múltiples factores
de riesgo cardiovascular de origen metabó-
lico, constituye en la actualidad una situa-
ción clínica muy prevalente. La Federación
Internacional de Diabetes (FID) estima que
un cuarto de la población mundial la pade-
ce (25%), aunque esto varía entre el 10 al
84% de acuerdo con la región (urbana, ru-
ral), composición de la población estudiada
(sexo, edad y etnia) y según la definición de
SM utilizada. Sin embargo, en términos ge-
nerales puede afirmarse que una de cada
tres o cuatro personas mayores de 20 años
cumple criterios para diagnóstico de SM.
La prevalencia aumenta de acuerdo con
la edad, es un poco más frecuente en las
mujeres, en zonas rurales y se ha incremen-
tado en la última década. Este síndrome
puede ser explicado por la participación de
factores como la raza, malnutrición materno
infantil, inadecuados estilos de vida como
malos hábitos alimenticios y el sedentaris-
mo, producto del proceso de urbanización,
GARCÍA DELGADO , H. R. ., VINTIMILLA MARTÍNEZ , J. D. ., VERA JARA, C. A. ., & JIMÉNEZ BARCIA , W. E.
avances tecnológicos e incluso del enveje-
cimiento de la población (2).
En América Latina, “la prevalencia del sín-
drome metabólico ha experimentado un in-
cremento en los últimos años, en especial
en la hipertensión arterial, con tasas que
varían entre el 25% y el 45%” (Ospina et
al., 2011, p.22, citado por Cevallos Diaz &
López Villareal (3)). En este contexto, según
la Organización Mundial de la Salud (2020)
se ha observado que las personas que han
sufrido infartos agudos o accidentes cere-
brovasculares tienen una alta prevalencia
del síndrome metabólico, representando el
75% de estos casos, independientemente
de los criterios utilizados para diagnosticar
la condición (3).
Se dice que los componentes del síndrome
son marcadores de la existencia de anor-
malidades en diversas vías metabólicas re-
guladas por la insulina. El exceso de grasa
intraabdominal, que resulta en una mayor
concentración de ácidos grasos en la circula-
ción portal, causa un aumento en la produc-
ción hepática de lipoproteínas y resistencia
hepática a la insulina. Así, la obesidad abdo-
minal se asocia con un depósito anormal de
lípidos en tejidos como el hígado y el múscu-
lo estriado, lo que explica la menor sensibi-
lidad a la insulina. La alteración en la acción
de la insulina predispone a hiperglucemia, la
cual, a su vez, induce a hiperinsulinemia, y
si la hiperinsulinemia no es de la magnitud
suficiente para corregir la hiperglucemia,
se manifestará la DT2. Las concentraciones
excesivas de insulina podrían incrementar
la reabsorción de sodio en los túbulos rena-
les, lo cual causaría HTA. El incremento en la
producción de lipoproteínas de baja densi-
dad (VLDL) en el hígado conduciría a hiper-
trigliceridemia (y en consecuencia a bajas
concentraciones de C-HDL), lo que también
contribuiría al hiperinsulinismo (4).
Metodología
Para llevar a cabo esta revisión, se realizó
una búsqueda exhaustiva en las bases de
datos científicas PubMed, Scopus y Co-