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RECIMUNDO VOL. 8 N°3 (2024)
nocido y ciertas comorbilidades del pacien-
te (inmunosupresión, tabaquismo actual,
diabetes mal controlada) (14).
En el caso que nos ocupa, que es la re-
construcción de los defectos de los tejidos
blandos se utilizan diferentes técnicas, col-
gajos, injertos e implantes. Estos deben ser
biocompatibles, relativamente económicos,
siempre disponibles, no infecciosos, no
alergénicos, no tóxicos, de tamaño variable
y capaces de evitar la reabsorción en la me-
dida de lo posible. Por un lado, es posible
utilizar una variedad de colgajos locales,
como colgajos de avance, colgajos de trans-
posición y colgajos de rotación. En el caso
de defectos importantes, se debe enfatizar
especialmente el colgajo nasolabial, el col-
gajo frontal y el colgajo de rotación de meji-
lla. Por otro lado, se pueden utilizar colgajos
pediculados regionales, como los colgajos
deltopectorales o los colgajos miocutáneos
del pectoral mayor. En tercer lugar, es posi-
ble una transferencia de tejido libre. En este
caso, se utilizan injertos de piel, injertos de
grasa libre, injertos de dermis y grasa, injer-
tos de cartílago, injertos compuestos o in-
jertos óseos, aunque los trasplantes óseos
se utilizan especialmente en defectos com-
binados de tejido blando y óseo. En cuarto
lugar, se trasplantan todo tipo de injertos
anastomosados microvasculares, como el
colgajo radial del antebrazo o el colgajo del
dorsal ancho. Otras posibilidades son los
aloinjertos, esta dermis acelular se obtiene
a partir de piel de cadáver humano tras la
eliminación de la epidermis y de los compo-
nentes celulares de la dermis mediante un
proceso de liofilización, que se utiliza sobre
todo en la cirugía de la parótida. También
se pueden utilizar materiales aloplásticos o
implantes. En particular, cada vez se colo-
can más implantes específicos para el pa-
ciente, incluso si la indicación principal es
un defecto óseo. Es evidente que no todas
las formas de defectos del contorno facial
pueden tratarse con la misma técnica qui-
rúrgica, injerto o implante (15).
La reconstrucción basada en colgajos lo-
cales es la técnica más usada en grandes
defectos traumáticos, con excelentes resul-
tados. El colgajo es una porción de tejido
vascularizado que se moviliza desde una
zona donante hasta una receptora adya-
cente o distante, que está adherido al cuer-
po por una arteria y vena principal capaz de
mantener su irrigación durante los sucesivos
estadios de transferencia. Sus principales
indicaciones están dadas en la reconstruc-
ción de un defecto local con tejido similar
adyacente, y la necesidad de cobertura de
tejido relativamente menos vascularizado
con piel de espesor completo para lo cual
el injerto es insuficiente. Las técnicas de le-
vantamiento de colgajos locales se basan
principalmente en los colgajos tipo: los col-
gajos rotacionales, de traslación, de avance
y de isla; así podemos ver diversos colgajos
utilizados en las distintas regiones, siendo
los más frecuentes, el colgajo frontal, colga-
jo de avance y rotación de mejilla, colgajos
romboidales, cérvico-faciales, bilobulados,
nasolabiales, entre otros. El avance de la
tecnología y la cirugía como la microcirugía
o colgajos regionales son una buena opción
en la reconstrucción facial, pero los colga-
jos locales ocupan el primer lugar en este
tipo de reconstrucción evitando una mayor
morbilidad con resultados cosméticos res-
petables. Los colgajos permiten al cirujano
reconstruir defectos a lo largo del cuerpo,
y restaurar su forma y función. No existe un
colgajo ideal, se trata de un proceder indi-
vidualizado, para cada paciente debe pla-
nificarse acorde a sus características pro-
pias, así como a las del defecto residual a
reconstruir (6).
Ahora bien, las múltiples características y
puntos clave a tomar en cuenta al momento
de considerar un colgajo local para la recons-
trucción de tejidos blandos faciales son vitales
para la obtención de los mejores resultados,
en este sentido, algunas recomendaciones a
seguir se indican con base en las unidades
estéticas de la cara, tal y como lo indica el
estudio de o Huentequeo et al, (2021):
RESULTADOS FUNCIONALES Y ESTÉTICOS DE LA RECONSTRUCCIÓN FACIAL POST TRAUMA: COMPARA-
CIÓN ENTRE TÉCNICA DE INJERTO DE TEJIDO VS. FLAPS LOCALES