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RECIMUNDO VOL. 8 N°2 (2024)
Introducción
El trauma es la causa más frecuente de
necesidad de reconstrucción del miembro
inferior. Los mecanismos del trauma varían
según el país, pero son comunes los acci-
dentes de motocicleta o automóvil, los ac-
cidentes industriales y el trauma militar. La
gravedad del trauma a veces amenaza la
viabilidad de la extremidad lesionada, y el
equipo quirúrgico debe decidir si intentar
salvar la extremidad o amputarla. La lesión
del miembro inferior puede comprometer
nervios, estructuras vasculares, huesos, ar-
ticulaciones y tejidos blandos, requiriendo
frecuentemente la competencia de diversas
especialidades quirúrgicas (1).
Para ello hay que tener en cuenta que en
los defectos con exposición ósea, nerviosa,
vascular o de material de osteosíntesis, los
colgajos deben ser la primera opción de co-
bertura. Para seleccionar el colgajo a utilizar
es necesario identificar el tipo de tejido a re-
construir y su localización exacta. Cuando el
defecto se encuentra en el tercio distal de la
pierna y en el pie, las opciones de los colga-
jos locorregionales son restringidas (2).
Una de las clasificaciones de las fracturas
abiertas más utilizadas es la de Gustilo, que
permite predecir el pronóstico del paciente
y que las divide en tipos I, II y III, existiendo
además una subdivisión del tipo III en A, B y
C. Las de tipo IIIB, defecto extenso de par-
tes blandas, fractura conminuta con efrac-
ción de periostio, con necesidad de cober-
tura con colgajo, y las de tipo IIIC, cualquier
fractura abierta con compromiso vascular,
son las que más frecuentemente requieren
participación del cirujano plástico (3).
Un colgajo es un segmento de tejido que
se moviliza de una parte del cuerpo a otra
manteniendo su propia vascularización. A
diferencia de un injerto, un colgajo no se
nutre del lecho sobre el que se coloca, si no
que recibe sangre por sus propios vasos.
Los colgajos pueden estar formados por
piel, fascia, músculo, hueso, nervio o car-
COLGAJOS REGIONALES PARA DEFECTOS COMPLEJOS DE PIERNA
tílago y combinaciones de los mismos, por
tanto, podemos tener colgajos cutáneos,
fasciocutáneos, musculocutáneos, muscu-
lares, etc (1).
Metodología
Para llevar a cabo esta revisión bibliográfi-
ca, se realizó una búsqueda exhaustiva en
bases de datos científicas como PubMed,
Scopus y SciELO, utilizando términos clave
como "colgajos regionales", "defectos com-
plejos de pierna", "reconstrucción", "cirugía
plástica" y combinaciones relevantes. Se
establecieron criterios de inclusión y exclu-
sión para seleccionar los estudios que cum-
plían con los objetivos de la revisión, consi-
derando aspectos como el tipo de estudio
(ensayos clínicos, revisiones sistemáticas,
estudios de casos). Los artículos seleccio-
nados fueron analizados en profundidad,
extrayendo información sobre la técnica
quirúrgica, las indicaciones, las complica-
ciones y los resultados obtenidos.
Resultados
A continuación, se presentan algunos col-
gajos ampliamente utilizados:
Colgajo DIEP (deep inferior epigastric
perforator o perforante de arteria epigás-
trica inferior)