Walter A. González García a; Lilia A. Toral Morante b; Norma B. Arellano Hernández c; William R. Giler Cedeño d; Ericka S. Marchán Menendez e; Dagmar Y. Meza Solórzano f; Katherine I. Bermeo Iñiguez g

 

 

Patrones alimentarios relacionados al estado nutricional en pacientes con VIH del

 

Hospital Guayaquil

 

 

 

Dietary patterns related to the nutritional status of HIV patients in Guayaquil

 

Hospital

 

 

 

Revista Científica Mundo de la Investigación y el Conocimiento. Vol. 3 núm.3, septiembre, ISSN: 2588-073X, 2019, pp. 1384-1400

 

 

DOI: 10.26820/recimundo/3.(3).septiembre.2019.1384-1400

 

URL: http://recimundo.com/index.php/es/article/view/575

 

Código UNESCO: 3206.06 Necesidades Alimenticias

 

Tipo de Investigacn: Artículo de Investigación

 

 

 

Editorial Saberes del Conocimiento

 

 

 

Recibido: 15/05/2019             Aceptado: 23/06/2019            Publicado: 30/09/2019

 

Correspondencia:  walteradal@yahoo.es

 

 

 

a.     Docente de la Escuela de Nutrición; Universidad Técnica de Babahoyo; Babahoyo, Ecuador;  walteradal@yahoo.es

b.     Servicio de Nefrología; Hospital Abel Gilbert Pontón de Guayaquil; Guayaquil, Ecuador;  liliatoral_3@hotmail.com

c.     Unidad     de     Cuidados     Intensivos;     Hospital     Abel     Gilbert     Pontón     de     Guayaquil;     Guayaquil,     Ecuador;

betsita_123@hotmail.com

d.     Unidad    de    Especialidades    Clínicas;    Hospital    Abel    Gilbert    Pontón       de    Guayaquil;     Guayaquil,    Ecuador;

wgilercedeo@yahoo.com

e.     Analista  de  Nutrición.  Hospital   Gineco;   Obstétrico  Pediátrico   Universitario   de  Guayaquil;   Guayaquil,   Ecuador;

erismarc2089@gmail.com

f.     Técnico      Docente      de      la      Carrera      de      Nutrición;      Universidad      de      Guayaquil;      Guayaquil,      Ecuador;

dagmarmezas1995@gmail.com

g.     Maestrante en Nutrición Infantil de la ESPOCH; Riobamba, Ecuador;   kath.bermeo@gmail.com


 

RESUMEN

 

Introduccn. Los patrones alimentarios en los pacientes con HIV, están afectando su estado nutricional con  la aparición de  enfermedades concomitantes, este estudio está orientado a tomar correctivos desde su diagnóstico. Objetivo. Determinar como los patrones alimentarios, tiene una relación directa en el estado nutricional de los pacientes con VIH del Hospital Guayaquil Dr. Abel Gilbert Pontón. todo. Estudio descriptivo transversal no experimental, con una muestra de 277 pacientes, se realizó valoración antropométrica, se aplicó una encuesta de frecuencia de consumo alimentario y de estilo de vida. Los resultados fueron analizados usando el Programa Excel de Microsoft Office de Windows 10.  Resultados. El 64% de sexo femenino; 35,7% de sexo masculino; El 51,33% de la población está en Normopeso, el 28% Sobrepeso y el 17% en Obesidad de acuerdo al IMC. El 39% de la población presentó riesgo cardiovascular según el Índice de cintura/cadera (ICC); El 72% de la población tiene un estilo de vida sedentario. Discusión  y  conclusiones.    Presentan  un  alto  riesgo  cardiovascular  porque  el  45%  de  la población estudiada está en  sobrepeso y obesidad, que es representativo a adquirir enfermedades crónicas no transmisibles.

 

Palabras Claves: Virus de Inmunodeficiencia humana; Estado nutricional; Riesgo cardiovascular.


 

ABSTRACT

 

 

Introduction. The eating patterns in patients with HIV, are affecting their nutritional status with the occurrence of concomitant diseases, this study is aimed at taking corrective measures from diagnosis. Objective. Determine how the eating patterns have a direct relationship in the nutritional status of HIV patients at the Hospital Guayaquil Dr. Abel Gilbert Ponton. Method. Transversal non-experimental descriptive study, with a sample of  277  patients, an anthropometric  assessment  was  carried  out,  a  frequency  survey  of  food  consumption  and lifestyle was applied. The results were analyzed using the Microsoft Office Excel Program of Windows 10. Results. 64% female; 35.7% male; 51.33% of the population is in Normal, 28% overweight and 17% in Obesity according to the BMI. 39% of the population presented cardiovascular risk  according to  the  hip  waist  Index  (ICC);  72%  of  the  population has  a sedentary lifestyle. Discussion and conclusions. They present a high cardiovascular risk because

45% of the population studied is overweight and obese, which is representative of acquiring chronic noncommunicable diseases.

 

Key Words: Human immunodeficiency virus; nutritional status; cardiovascular risk.


 

Introduccn.

 

 

 

El VIH afecta a la capacidad del organismo de combatir infecciones concomitantes que deterioran el sistema inmunológico y pueden ocasionar la muerte. Los medicamentos usados para tratar el VIH han mejorado la calidad de vida y aumentado la esperanza de vida; El tratamiento antirretroviral (TAR) ralentiza la replicación de virus, pero no elimina la infección por VIH. La tuberculosis sigue siendo una de las principales causas de muerte; En el 2016 representó el 42%, el mismo porcentaje de muerte del año 2004 [1]. Concomitantemente los pacientes con HIV tienen mayor riesgo de presentar enfermedades cardiovasculares, hay una asociación entre factores proinflamatorios entre ellos [2]; Las enfermedades crónicas no transmisibles y el VIH con sindémicos y se relacionan con una prevención combinada, los retrovirales contribuyen de alguna manera a un riesgo cardiovascular [3]. Existe una fuerte evidencia que los tradicionales factores de riesgo para enfermedades cardiovasculares, son más frecuentes en personas con HIV, muchos estudios sugieren que aumenta del 50 al 100%, incluso después de mantener el control de las causas de riesgo [4].

 

Mantener un buen estado nutricional es importante para retrasar la progresión del VIH al SIDA  y  prevenir  nuevas  infecciones.  Una  de  las  barreras  que  se  presenta  como  efecto secundario,  el tratamiento antirretroviral inhibe la alimentación, en su fase de inicio de la enfermedad, por lo que el tratamiento se ve interrumpido [5]. Es importante que los pacientes con HIV  tengan  mensualmente  una  valoración  del  estado  nutricional,  que  implique  también educación alimentaria [6]; Con el fin de darle a conocer el valor y el contenido de los nutrientes


 

para contrarrestar los efectos negativos que muchas veces surgen durante el tratamiento. Para desarrollar las recomendaciones nutricionales adecuadas, el profesional de la nutrición debe familiarizarse con la fisiopatología de la infección por VIH, las interacciones entre fármacos y nutrientes, y las barreras a una nutrición adecuada. También se debe considerar el estado mental y el consumo de drogas ilegales, porque ambos pueden afectar a la ingesta nutricional [7].

 

A través del presente estudio pretendemos mostrar los patrones alimentarios que tiene los pacientes diagnosticados con VIH en el Hospital Abel Gilbert Pontòn, especialmente sus preferencias, con la finalidad de realizar un abordaje nutricional, para que pueda llevar una dieta equilibrada acorde a su presupuesto [8] .

 

 

MÉTODO

 

 

 

Muestra

 

 

 

Un estudio descriptivo, transversal no experimental, para determinar los patrones alimentarios, estilo de vida y su relación con el estado nutricional en los pacientes diagnosticados con  HIV  del  Hospital  Guayaquil  Dr.  Abel  Gilbert  Pontón,  en  el  año  2017.  La  muestra constituida por 277 pacientes que cumplieron con los criterios de elegibilidad propuestos en la investigación; 178 mujeres y 99 hombres.

 

Normas éticas de investigación

 

 

 

Se solicitó la aprobación del Director del Hospital Guayaquil   y   a mismo el consentimiento informado, para la aplicación del estudio de cada uno de los participantes.


 

Instrumentos

 

 

 

El peso se midió en una báscula marca SECA® con una precisión de 0,1 kg; La talla se obtuvo midiendo con cinta métrica adosada a la pared, con el nivel 0 en el piso, el paciente con los pies descalzos y unidos, se colocaba de espaldas a la pared, tocando ésta en cuatro puntos: talones, gteos, espulas, y cabeza, la que seguía el plano de Frankfort.

 

Se aplicó la fórmula peso/talla2, para obtener el IMC, el resultado del estado nutricional se ubicó según la clasificación de la OMS: bajo peso (< 18,0); peso normal (18,0 - 24,9); sobrepeso (25,0 - 29,9); obesidad (30,0 o más). El índice cintura/cadera (ICC), correspondió a la relación  que  se  obtiene  de  dividir  el  perímetro  de  la  cintura  entre  el  de  la  cadera,  y  se consideraron valores de riesgo cardiovascular los determinados por la OMS: por encima de 0.88 para las mujeres y de 0.99 para hombres.

 

También se realizaron una encuesta de consumo alimentario basado en la diversidad y naturaleza alimentaria.  Instrumentos validado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) [9].

 

Los pacientes fueron interrogados acerca del grado de la actividad física. Esta fue clasificada  de  acuerdo  a  la  intensidad  como  ligera,  moderada  e  intensa,  utilizando  como referencia las pautas elaboradas por el Institute of Medicine of the National Academies” (Washington DC, Estados Unidos) [10].


 

Técnica de análisis de datos

 

 

 

Los resultados fueron expuestos en tablas y gráficos usando el Programa Estadísitco

 

SPSS 24.

 

 

 

Procedimiento

 

 

 

Previa información de los pacientes implicados en el estudio, se tomó los datos de filiación, se realizó la evaluación antropométrica, la encuesta de frecuencia de consumo de alimentario basado en la diversidad y naturaleza alimentaria y el nivel de actividad fisca. Los datos fueron procesados con porcentajes y estadísticas descriptivas.

 

Resultados.

 

 

 

De acuerdo a los datos  de los participantes. En la figura 1 se muestran que     178 pacientes, son del sexo femenino que representa el 64,26% y 99 del sexo masculino que representaron el 35,74% de la muestra.


 

 

 

 

 

 

 

Figura 1. Distribución de pacientes según sexo

 

En la figura 2, de acuerdo a los datos obtenidos, se aplicó la rmula peso/talla2, para obtener el IMC, el resultado del estado nutricional, el 51 % está normopeso; el 29% con sobrepeso, el 17% en obesidad y solo un 3% en desnutrición.

 

 

 

 Figura 2.  Estado Nutricional según Índice de masa corporal

 

 


 

En la figura 3 de acuerdo al índice cintura/cadera, se encontró que el 62% de la población está con riesgo cardiovascular; El 38% no lo presenta

 

está con riesgo cardiovascular; El 38 % no lo presenta.

 

 

 Figura 3. Riesgo Cardiovascular


En  la  figura  4  acerca  del    factor  de  actividad,  se  encontraron  que  un  71,9  %  de investigados presentan un nivel de actividad física ligera; El 24,17 % moderada y apenas el 3,96 % intensa. Esto representa que la mayor parte de la población estudiada es sedentaria.


 

 

 

 

 

Figura 4. Factor de actividad

 

 

 

En la tabla 1, en la frecuencia de consumo de alimentos, los carbohidratos representan un alto consumo,   y la cuota proteica se ve disminuida, produciendo una malnutrición y los hace más susceptibles a otras enfermedades concomitantes.

 

Tabla 1. Frecuencia del consumo de alimentos

 

 

 

 

ALIMENTOS

 

A Diario

3-6 veces /

semana

1-2 x semana

 

1 al mes

 

Nunca

Pollo

15,52

47,65

35,38

0,72

0,72

Pescado

7,58

26,35

51,99

11,19

2,89

Carne

5,42

19,86

54,51

16,97

3,25

H u e v o s

19,13

23,47

41,16

10,47

5,78

Leche

44,04

22,38

17,69

4,69

11,19

Queso

52,35

23,83

15,52

3,61

4,69

Yogurt

23,10

15,16

24,91

18,41

18,41

Frutas

54,15

22,02

13,72

6,50

3,61


 

 

Granos Tiernos

22,38

39,71

29,24

4,69

3,97

 

Granos Secos

16,25

26,71

31,77

10,11

15,16

Arroz

87,73

9,03

2,53

0,00

0,72

Panes y cereales

51,99

18,77

18,77

4,69

5,78

Legumbres

53,79

27,80

15,52

1,44

1,44

 

La figura 5 Evidencia un desequilibrio calórico enfocado mas a los almidones, que los expone a cambios metabólicos, el exceso de energía que provoca los mismos, se almacena en

grasa.

 

 

 

 

Figura 5. Frecuencia del consumo de arroz, cereales y granos

 

La figura 6 nos muestra que el consumo de pollo es más frecuente, dejando al pescado, en una frecuencia ocasional; los pescados son ricos en omega 3, que debean ser una mejor opción por sus efectos antiinflmatorios.

 

 

Figura 6. Frecuencia del consumo de carnes / proteína

 

 

 

La figura 7 nos muestra  que el consumo de lacteos es bajo, esto nos ayuda  a hacer cambios, para  icentivar a la población,  que el consumo de yogurt fuente rica de probioticos, calcio y otras micronutrientes,  mejora la microbiota  y reducir el riesgo de contrarer otros patógenos.

 

 

 

Figura 7. Frecuencia del consumo de cteos y derivados.

 

 

 

Discusión y conclusiones

 

 

 

De acuerdo a los datos del Ministerio de Salud Pública, obtenidas en el año 2017 [11] , la infección por el virus de VIH, está  concentrada, principalmente en personas transfemeninas (MTF), con un 34,8% en Quito y 20,7% en Guayaquil, y de hombres (HSH), 16,5% en Quito y

11,2% en Guayaquil: En nuestro estudio se determi que hay una relación de mujer hombre de

 

2:1. De acuerdo a la información global y de educación sobre el HIV [12], las mujeres  tienen el doble de probabilidades  en relación a los hombre de la misma edad. Existen muchos factores que hace que las mujeres sean más vulnerables, como su estatus social, cultural, económico, violencia de género, entre otras.  Este complemento genético es relevante, para consolidar la eficacia y resultados al tratamiento según el sexo, para modular el tratamiento de haber diferencias entre ambos sexos [13].


 

Las comorbilidades, como las enfermedades metabólicas y cardiovasculares, están siendo la principal causa de muerte en pacientes infectados con VIH [14]. En la Unidad ambulatoria de HIV, el 53% estaban con sobrepeso y obesidad y el 62% con un riesgo cardiovascular por aumento del perímetro abdominal, demostrando una fuerte asociación entre ellos. La proporción de pacientes infectados por HIV en América del Norte y Europa, ha aumentado en las dos últimas décadas y se aproxima a la paridad con la población en general [15]. En un estudio longitudinal de una clínica ambulatoria de HIV en Baltimore identificaron factores de riesgo asociados  al  sobrepeso  y  obesidad,  se  comprobó  que  es  alta  la  prevalencia  de  infarto  de miocardio y de arteriopatía en estos pacientes que tiene un IMC >26 [16].

 

Al revisar su patrón alimentario, hay una clara evidencia que  identifica una dieta rica en carbohidratos con predominio de arroz y cereales, en su patrón alimentario 1; Seguido de un patrón 2, donde hay una alta carga del consumo de huevos; Y al considerar los cteos, más predomina el consumo de leche; Este patrón dietético, se lo considera con baja diversidad” [17]. En un estudio basado en las modificaciones dietéticas, se puede inducir que existen cambios en la microbiota que podrían afectar los trastornos metabólicos [18].

 

Existe una insuficiencia nutricional en los pacientes objeto de estudio, creando una desnutrición metabólica, alterando el estado nutricional. En un estudio transversal donde se reclutó a 340 personas con VIH, se utilizó la escala de frecuencia alimentaria, para evaluar la ingesta y calidad alimentaria [19], se comprobó que la ingesta de proteínas, vitaminas y fibra era inferior a los requerimientos diarios. Así mismo     un estudio transversal en nueve centros en Brazil  especializados con pacientes HIV , se demostró que era alta la ingesta de carbohidratos y grasas a las cantidades diarias recomendadas [20], una gran parte de la población presentó una ingesta inadecuada de grasas, sodio, fibra y calcio.


 

Se ha demostrado, que una actividad física moderada, está asociado a un impacto menor, frente a cualquier riesgo de alguna enfermedad. El 71,9% de la población estudiada, tiene una actividad física ligera,  que no confiere los mismos beneficios [21].    En una revisión temática realizada en bases de datos Lilacs, Ebsco, Cochrane Library y Pubmed entre junio y julio de

2017, con la finalidad de rehabilitar de una manera integral al paciente con HIV, concluye que todos estos pacientes deben ser valorados por un especialista en terapia física y rehabilitacn, para minimizar una disfunción temprana [22].

 

Como conclusiones, es importante mencionar que, desde el diagnóstico con HIV, el paciente debe tener una atención integral, que no solo va en recibir un tratamiento terapéutico y psicológico, que por cierto es muy importante; sino inclusivo en todas las áreas. Un abordaje neuropsicológico permiti mejorar su estado psicosocial por el rechazo y discriminación que son objeto.  Todo paciente debe tener una evaluación nutricional alimentaria, para corregir los excesos y deficiencias, para evitar comorbilidades. Crear políticas de estado, basado en la seguridad alimentaria y acceso a suplementaciones, para mejorar el cumplimiento de su tratamiento y buscar estrategias que les un acceso a tener una actividad física, para mejorar su componente musculoesquelético y evitar un descondicionamiento físico.


 

Referencias.

 

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MacFarland & Company. Usa 2017.

 

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HIV. AIDS.Pubmed. Vol.30, pp 1495–1509, June 2016.

 

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[4] T. Camacho, «HIV and NCDs: the need to build stronger health systems, » The Lancet

Diabetes & Endocrinology, vol. 4, nº 7, pp. 549-550, 2016.

 

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