David Israel Cárdenas Acosta a; Sandra Elizabeth Montufar Paguay b
Indicaciones de Orquidopexia en problemas testiculares en recién nacidos
Indications of Orchidopexy in testicular problems in newborns
Revista Científica
Mundo de la Investigación
y el Conocimiento.
Vol. 3 núm.3. Esp., noviembre, ISSN:
2588-073X, 2019, pp. 146-158
DOI: 10.26820/recimundo/3.(3.Esp).noviembre.2019.146-158
URL: http://recimundo.com/index.php/es/article/view/594
Código UNESCO: 3205 Medicina Interna
Tipo de Investigación: Artículo
de Revisión
© RECIMUNDO;
Editorial Saberes
del Conocimiento,
2019
Recibido: 15/09/2019 Aceptado: 23/10/2019 Publicado: 30/11/2019
Correspondencia: me.israel.cardenas@gmail.com
a. Médico General; Investigador Independiente; Guayaquil, Ecuador; me.israel.cardenas@gmail.com
b. Médico General; Investigadora Independiente; Guayaquil, Ecuador; sandramontufar@rocketmail.com
RESUMEN
Hoy en día la indicación para
la Orquidopexia en pacientes con criptorquidia mayor de un año de edad, es la reducción del riesgo de torsión, facilita la exploración del testículo, sobre todo si
se presenta un tumor testicular, mejora la función endocrina del mismo y
crea un escroto con
apariencia normal. La criptorquidia
es la falta del descenso testicular (TND). La metodología de la investigación es de tipo
revisión bibliográfica. Las principales conclusiones indican que esta afección se puede generar durante el término de la gestación y que no puede pasar mucho tiempo
para ser corregida por que
pone en riesgo la zona
testicular, aparte
que su corrección preserva
la función reproductiva y
hormonal del testículo, se recomienda la laparoscopia para corregir esta malformación, ya que los procedimientos
de abertura total pueden generar mayores
complicaciones. Básicamente
la intervención quirúrgica
lo que hace es descender el testículo hasta la bolsa escrotal.
Palabras
clave: Criptorquidia; Orquidopexia; Testículo; Escroto; Laparoscopia.
ABSTRACT
Nowadays the indication for
Orquidopexia in patients with cryptorchidism older than
one year of
age, is the reduction of the risk of torsion,
facilitates the examination of the testicle, especially if a testicular tumor occurs, improves its endocrine function and creates A scrotum
with normal appearance. Cryptorchidism is the lack of testicular descent (TND). The research methodology is
a bibliographic review type. The
main conclusions indicate that this condition can be generated
during the term of pregnancy and that it may
not take long to be corrected because it puts the
testicular area at risk, apart
from the fact that its correction preserves the reproductive
and hormonal function of the testis, it is recommended laparoscopy to correct this malformation,
since the procedures of total opening can generate major complications. Basically the surgical intervention what
it does is lower the
testicle to the scrotal
bag.
Keywords:
Cryptorchidism; Orchidopexy; Testis;
Scrotum; Laparoscopy.
Introducción.
El testículo no descendido (TND) se diagnostica desde
el
nacimiento o en las primeras consultas con el pediatra; se
considera la malformación urogenital más frecuente en el varón. La
revisión del área inguinal en búsqueda del testículo no siempre es sencilla y exige la intervención de un médico pediatra experimentado;
en consecuencia, cuando no puede palparse, debe consultarse al urólogo pediatra. Esta anomalía
se presenta en el 3% al 5% de los recién nacidos y en el 0.8% de los lactantes después de los 10 meses de
edad. En la mayor
parte de los casos, el descenso tiene
lugar en los primeros tres meses de edad (Riquelme Heras, Landa
Juárez, Miguel Gómez, Meneses
Juárez,
& Andraca Dumit,
2009, pág. 216).
Imagen 1. Testículos
no descendidos
Fuente: (Neff,
s.f.).
A la falta de descenso testicular se le conoce como Criptorquidia, la cual tiene gran
importancia clínica dada sus implicaciones tanto en la fecundidad
como en el desarrollo de tumores malignos. Hoy en día la indicación para la Orquidopexia en pacientes con criptorquidia mayor de un año de edad, es la reducción del riesgo de torsión, facilita la exploración del testículo, sobre todo si se presenta un tumor testicular, mejora la función endocrina del mismo y crea un escroto con apariencia normal (Herrera García, Cuevas Alpuche, Solorzano Morales, Aguilar Anzures, & Olivera Vasquez, 2008, pág. 162).
Generalmente,
los testículos se
ubican en la
bolsa escrotal
durante
el período de gestación. En este periodo, los testículos se desarrollan y
descienden desde cavidad abdominal,
hacia la bolsa escrotal, por
medio de los canales inguinales. Si bien
la criptorquidia no tiene
ninguna sintomatología específica que oriente el cuadro clínico, el médico deberá estar
atento al descenso de ambos testículos, desde el nacimiento del niño hasta cumplir el año de
vida
(Chocho Tapia, 2013, pág. 10).
La
criptorquidia afecta al 4% de los varones recién nacidos. Aproximadamente de 70% a
77% de los testículos
criptorquídicos desciende espontáneamente a los 3 meses de edad. El bajo
peso al nacer puede ser el factor principal de la criptorquidia al nacer y
durante el primer año de
vida, independientemente de la duración de
la gestación. El 80% de los testículos no descendidos son palpables y el restante 20% no se palpa. El descenso testicular se completa normalmente
entre 30 y 32 semanas de gestación (Herrera-García,
Cuevas-Alpuche, Olivera-Vázquez, Aguilar-Anzures, & Granados-Navas, 2009, pág. 89).
La criptorquidia
ha aumentado en los últimos 20 años, por
mejor reconocimiento de
la patología y mayor número de niños prematuros que sobreviven después del nacimiento. La
clasificación más utilizada lo divide en palpable
o no palpable y, por su localización, en aquel
que detuvo su descenso en alguna parte del trayecto normal o en testículo
ectópico verdadero, cuando su descenso se localiza fuera del trayecto normal; este puede encontrarse en la región perineal, conducto femoral, área púbica próxima al pene e incluso en hemiescroto contralateral (Córdova, Marín, Sánchez-Paredes, & Borbolla-Sala, 2013).
Imagen 2. Bolsa escrotal y testículo derecho
Fuente: (Córdova, Marín, Sánchez-Paredes,
& Borbolla-Sala,
2013).
Imagen 3. Orquidopexia y realización
de colgajo
Fuente: (Córdova, Marín, Sánchez-Paredes,
& Borbolla-Sala, 2013).
Imagen 4. Testículo y bolsa escrotal
en posición anatómica normal
Fuente: (Córdova, Marín, Sánchez-Paredes,
& Borbolla-Sala,
2013).
Atendiendo
a la localización de los testículos no palpables, se plantea la cirugía más
adecuada para cada paciente. Las limitaciones de la ecografía, tomografía axial computarizada (TAC) y resonancia magnética demuestran que no existe un método de imagen ideal para localizar estos testículos. La laparoscopia fue utilizada inicialmente como herramienta diagnóstica para estos testículos no palpables con una mayor precisión que los métodos de imagen. Pero fue Jordan y cols, en 1992 los que introdujeron la aplicación terapéutica de la laparoscopia en varones con testes no palpables. Con los avances en la técnica e instrumentación, la Orquidopexia laparoscópica se ha convertido en el tratamiento de elección de los niños con testículos no palpables (Tejedor, y otros, 2008, pág. 191).
Para un teste no palpable la exploración laparoscópica es el “Gold Standard” y permite hacer diagnóstico y realizar descensos laparoscópicos en 1 o 2 tiempos según sea su cercanía al orificio
inguinal profundo (OIP). De esta
manera se recomiendan diversos
algoritmos de conducta en el tratamiento de una criptorquidia. Sin embargo, en la práctica
clínica, vemos que
existe un grupo de
pacientes con TND palpables de difícil resolución quirúrgica, en los que la liberación laparoscópica de los vasos espermáticos y el deferente en el retroperitoneo, facilitaría la
Orquidopexia abierta en un tiempo y mejoraría el pronóstico de posición y vitalidad testicular
a largo plazo (Sepúlveda, 2013,
pág.
14).
Metodología.
La
metodología de la investigación es de tipo revisión bibliográfica, para
ello se ha
recurrido a diferentes medios electrónicos, donde se han revisado trabajos de investigación similares que han estudiado todo lo referente a lesiones o condiciones testiculares en infantes y los métodos más utilizados o sugeridos para
corregirlos.
Resultados.
La localización
ectópica más frecuente es
la
región perineal, seguida del
conducto femoral, área púbica próxima al pene y finalmente hemiescroto contralateral. El 90% de las alteraciones escrotales; se
asocian a
hipospadias, cuerda o alteraciones del seno urogenital. Las
tres anomalías escrotales encontradas fueron: el escroto bífido,
transposición penoescrotal y el
escroto ectópico o accesorio (Córdova, Marín, Sánchez-Paredes, &
Borbolla-Sala, 2013, pág.
97).
En un estudio realizado a 142 pacientes con diagnóstico
de testículo no palpable, solo en
el
9% de los casos estudiados se
recomendó realizar una Orquidopexia
video-asistida
sin sección de los vasos espermáticos testículo no palpable y los resultados
fueron los siguientes:
· Los testículos fueron
descendidos a la bolsa escrotal sin existir ninguna complicación intraoperatoria en el 100% de los casos. El tiempo quirúrgico osciló entre 40 y 80 minutos (media, 60 minutos).
La primera revisión en consulta
se realizó a la semana de
la cirugía con posterior seguimiento entre 6 meses y 4 años (atendiendo
a cada caso). La
evolución ha sido satisfactoria en 11 de
los pacientes, mientras que
en
los otros 2 se produjo un ascenso del testículo
intervenido. Un Figura
1. Localización del teste criptorquídicos y sus elementos. Figura 2. Sección del gubernaculum distal. Figura 3. Descenso del testículo al escroto. Figura 4. Parche de peritoneo posterior entre vasos espermáticos y conducto deferente. Indicaciones, técnica y resultados de la orquidopexia laparoscópica en un solo tiempo 193 caso de
Orquidopexia laparoscópica se asoció a
la reparación de una hernia incarcerada (Tejedor, y otros,
2008, pág. 191).
En un estudio realizado en el servicio de urología del Instituto Nacional
de Pediatría, en donde
se tomó una muestra de 60 pacientes,
los resultados fueron los siguientes:
· El lado afectado más frecuente fue en forma bilateral en 23 pacientes (46%), el lado izquierdo en
segundo lugar con 18 pacientes (36%) y el lado derecho con nueve pacientes (18%).
· En cuanto a la localización del testículo
a nivel del canal inguinal en la exploración
prequirúrgica se encontró que en 25 pacientes (50%) se localizaron
en
el tercio medio del canal inguinal, en 16 pacientes (31%) en el tercio superior del canal inguinal y en 10
pacientes (19%)
en
el tercio inferior del canal inguinal (Herrera García, Cuevas Alpuche, Solorzano
Morales, Aguilar Anzures, & Olivera Vasquez,
2008).
En un estudio realizado en el Hospital de Especialidades de las Fuerzas Armadas de Quito,
donde se revisaron las historias clínicas de 110 pacientes con diagnóstico de criptorquidia, los resultados más
relevantes fueron
los siguientes:
· La edad más frecuente de realización de la Orquidopexia en pacientes con criptorquidia atendidos en el servicio de Cirugía Pediátrica del HE-1 fue de 1 año 1 mes a 3 años con un número de 51 casos que
corresponde al 46%; en orden descendente tenemos a las edades de
5 años 1 mes a 10 años con 26 que corresponde
al 24%; luego continúan los niños
< a un año con 11 casos correspondiente al 10% y finalmente los niños de 10 años
1 mes a 15 años con un número de 7
casos
correspondiente
al 6%.
· En la técnica quirúrgica de Bianchi del total de 69 pacientes, se determinó que 41 casos
tuvieron un tiempo de duración en la cirugía de 30 minutos correspondiente al 59%; mientras que en la técnica de Shoemaker el tiempo transcurrido en la duración de la cirugía predominó entre 31 a 45 minutos con 19 pacientes que representan el 46% (Chocho Tapia, 2013).
De enero de 2002 a septiembre del 2003 se intervino a 27 pacientes con 30 testículos no descendidos,
valorados de manera inicial por su médico pediatra y con diagnóstico clínico
confirmado por el cirujano o urólogo pediatra. En tres personas se presentó TND bilateral. A la
exploración inguinoescrotal, 19 testículos fueron palpables y 11 no palpables. De los palpables, 9
(47.3%) se localizaron en el tercio superior del canal inguinal, 4 (21.1%) en el tercio medio y
6 (31.6 %) en el inferior. Trece TND fueron derechos y seis izquierdos. La edad a la que se
operaron varió de ocho meses a nueve
años, con un promedio de
21.7 meses. Todos se
abordaron y operaron
con la técnica de Orquidopexia laparoscópica descrita. El tiempo
quirúrgico en ambos
grupos fue en promedio de 50 min. En el grupo de TND palpables, todos se hicieron
descender
por laparoscopia, excepto uno en el cual el testículo era ectópico y
se localizó por arriba de la
aponeurosis del oblicuo mayor, lo que obligó a su conversión a orquidopexia abierta. En
este grupo, cinco (26.3%) fueron
peeping testis y 13 (68.4%) en el
canal inguinal. Se identificó
hernia inguinal indirecta
en
15 casos (78%) (Riquelme
Heras, Landa Juárez, Miguel Gómez, Meneses
Juárez,
& Andraca Dumit,
2009, pág. 217).
Conclusiones.
· En líneas generales la Orquidopexia evita problemas generados por la criptorquidia
en niños mayores
a 1
año de edad, como
la
torsión, facilita la
exploración del testículo, sobre todo si se presenta un tumor testicular, mejora la función endocrina del mismo y
crea un
escroto
con
apariencia
normal.
· Es importante realizar la intervención quirúrgica antes de los 18 meses de edad, ya que
preserva la función reproductiva y hormonal
del testículo, pasada esa edad
las
alteraciones del
tejido testicular pueden ser irreversibles.
· la técnica laparoscópica es la más utilizada y con mayores éxitos para la corrección de la criptorquidia, en la mayoría
de los casos los testículos fueron
descendidos a la bolsa
escrotal.
· La Orquidopexia se presenta en durante el término de la gestación, lo que representa aproximadamente
un 3%, en lo que respecta a
la criptorquidia las intervenciones quirúrgicas
hay
estudios que las han realizado entre 1
a los 3 años de edad.
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