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Calidad de vida de en pacientes con trasplante de hígado
Quality of life in liver transplant patients
Qualidade de vida em pacientes transplantados hepáticos
Melina Dennise Medina Gamarra1; Francisco Andrés Medina Montoya2;
Jonathan Aníbal Puya Quinto3; Geovanny Mauricio Anchundia Anchundia4
RECIBIDO: 20/11/2019 ACEPTADO: 29/01/2020 PUBLICADO: 05/03/2020
CORRESPONDENCIA
Melina Dennise Medina Gamarra
mely-0109@hotmail.com
Guayaquil, Ecuador
© RECIMUNDO; Editorial Saberes del Conocimiento, 2020
RESUMEN
El hígado tiene muchas funciones, incluyendo crear proteínas y otras sustancias para el cuerpo, eliminar productos de desecho y toxinas de la sangre, metabolizar fármacos y almacenar energía. La enfermedad hepática ocasiona que estas funciones cruciales fallen. Cuando la insuficiencia hepática es demasiado severa para responder a medicamentos, el trasplante de hígado puede ser una opción. La metodología de la investigación, es de tipo revisión bibliográfica. Las conclusiones generales es que los trasplantes de hígado si mejoran la calidad de vida, los estudios revisados indican que las personas que reciben un trasplante se recuperan en un 100% y que desarrollan una vida normal aunque siempre la mejoría está asociada a factores como la edad, el sexo, la cultura, salud mental, vida familiar, vida sexual, mundo laboral, entre otros. El trasplante se debe realizar cuando hay una falla hepática que compromete el normal funcionamiento del hígado.
Palabras clave: Hígado, Hepática, Trasplante, Vida, Calidad.
ABSTRACT
The liver has many functions, including creating proteins and other substances for the body, removing waste products and toxins from the blood, metabolizing drugs and storing energy. Liver disease causes these crucial functions to fail. When liver failure is too severe to respond to medications, a liver transplant may be an option. The research methodology is of a bibliographic review type. The general conclusions is that liver transplants do improve quality of life, the studies reviewed indicate that people who receive a transplant recover 100% and lead a normal life, although improvement is always associated with factors such as age. , sex, culture, mental health, family life, sex life, work world, among others. The transplant should be performed when there is a liver failure that compromises the normal functioning of the liver.
Keywords: Liver, Liver, Transplantation, Life, Quality.
RESUMO
O fígado tem muitas funções, incluindo a criação de proteínas e outras substâncias para o corpo, removendo resíduos e toxinas do sangue, metabolizando drogas e armazenando energia. A doença hepática faz com que essas funções cruciais falhem. Quando a insuficiência hepática é muito grave para responder aos medicamentos, um transplante de fígado pode ser uma opção. A metodologia da pesquisa é do tipo revisão bibliográfica. As conclusões gerais são de que os transplantes de fígado melhoram a qualidade de vida, os estudos revisados indicam que as pessoas que recebem um transplante recuperam 100% e levam uma vida normal, embora a melhora esteja sempre associada a fatores como idade. , sexo, cultura, saúde mental, vida familiar, vida sexual, mundo do trabalho, entre outros. O transplante deve ser realizado quando houver uma insuficiência hepática que comprometa o funcionamento normal do fígado.
Palavras-chave: Fígado, fígado, transplante, vida, qualidade.
INTRODUCCIÓN
En las últimas dos décadas, el trasplante ha sido considerado uno de los mayores avances de la medicina, no sólo por su papel en la recuperación de la salud, sino también por el mejoramiento de la calidad de vida de personas con enfermedades crónicas y/o terminales por la falla de alguno de sus órganos. El trasplante puede ser el cambio de un problema médico por otro, lo cual no prevén los pacientes, a pesar de ser informados y preparados al respecto. No obstante, es una opción cuando hay una amenaza a la vida por la complicación de la condición hepática y se ha deteriorado la calidad de vida en niveles inaceptables, incluyendo un daño irreversible en el sistema nervioso central (Camacho, Andrade, & de Valderrama, 2007, pág. 384).
Un largo camino se ha recorrido desde que se realizó el primer trasplante hepático en 1963 hasta la fecha. Durante todo este tiempo han tenido lugar, importantes cambios que han permitido progresar y convertir el trasplante de hígado de un proyecto experimental en sus comienzos, en una alternativa terapéutica eficaz en la actualidad para numerosos pacientes que sufren enfermedades hepáticas agudas o crónicas de carácter irreversible y que se hallan en un estadio terminal de su proceso. Los avances y mejoras en la técnica quirúrgica, una adecuada selección de los candidatos y, fundamentalmente, una nueva terapia inmunosupresora, contribuyeron de forma considerable a aumentar las tasas de supervivencia (García, 2018, pág. 921).
El hígado tiene muchas funciones, incluyendo crear proteínas y otras sustancias para el cuerpo, eliminar productos de desecho y toxinas de la sangre, metabolizar fármacos y almacenar energía. La enfermedad hepática ocasiona que estas funciones cruciales fallen. Cuando la insuficiencia hepática es demasiado severa para responder a medicamentos, el trasplante de hígado puede ser una opción. Puesto que un trasplante es un procedimiento quirúrgico mayor y no existen suficientes órganos de donadores, no todas las personas con insuficiencia hepática pueden recibir un trasplante (La Revista de la American Medical Association, 2012). De las enfermedades hepáticas provocadas por el alcoholismo, el padecimiento de cirrosis es la causa más frecuente por la que se indica trasplante hepático en países de Europa y América del Norte (Salinas & Tovar, 2007, pág. 224).
El trasplante de hígado es considerado uno de los procedimientos más complejos de la cirugía moderna, cuyo suceso depende de una completa infraestructura hospitalaria, además de un equipo multiprofesional capacitado para atender pacientes gravemente debilitados e inmunodeprimidos. Es utilizado como recurso para obtener la sobre vivencia del paciente portador de una lesión hepática irreversible, cuando no hay ninguna otra forma de tratamiento disponible (Mendes & Galvão, 2008).
Aun cuando los resultados del trasplante hepático han mejorado, la atención se ha enfocado a mejorar la calidad de vida de estos pacientes. El concepto de calidad de vida incluye un estado de salud funcional, percepción de buena salud, satisfacción con la vida y habilidad para competir. Se han desarrollado diversos instrumentos para evaluar la calidad de vida de los pacientes que evalúan las áreas física y mental. Sin embargo, en el ámbito médico o social no existe un consenso sobre los conceptos que deben abordar los cuestionarios, algunos solo incluyen aspectos específicos como depresión o vitalidad, y otros integran aspectos físicos y mentales relacionados con la calidad de vida (Mendoza-Sánchez, y otros, 2016). La experiencia del trasplante trae aspectos importantes que afectan la calidad de vida de esas familias. La calidad de vida del paciente trasplantado y de la familia ha pasado a ser considerada el factor que evalúa el suceso del trasplante, en lugar del tiempo de sobrevida de esos pacientes (Mendes & Bousso, 2009).
Metodología
La metodología de la investigación es de tipo revisión bibliográfica, para ello se ha apoyado la presente investigación en medios electrónicos disponibles en donde se han encontrado una gran variedad de trabajos de investigación de todo tipo que hablan de los trasplantes de hígado y donde toman en cuanta elementos de importancia que se utilizaran como base para el presente trabajo.
Resultados
En la calidad de vida (CV) post-trasplante, al igual que previamente, influye la enfermedad de base y el estado general del paciente. Por eso, una adecuada selección de los candidatos incidirá de forma positiva en las posibilidades de éxito posterior. Los resultados acerca de la recuperación de la CV difieren, pero la valoración final y coincidente, comúnmente aceptada, es que la CV mejora después del trasplante. Sin embargo hay que matizar esa afirmación y exponer los diferentes niveles alcanzados en las distintas áreas (García, 2018, pág. 924).
Tabla 1. Factores para medir la calidad de vida post trasplante
Fuente: Autores 2020
La calidad de vida reflejada en la integridad de la persona representa una importante medida de éxito de una intervención médica, más allá de una alta tasa de supervivencia, debido a que la calidad de vida involucra cada detalle de las actividades de la vida diaria de la persona y su funcionamiento social. Aunque haya efectos inherentes a la recuperación postrasplante, como: limitación de actividades físicas, fatiga, cansancio y decaimiento, los participantes no se sintieron afectados en su calidad de vida, pues demostraron tener mejor autocontrol. Los resultados de nuestra investigación mostraron que la categoría de función social, obtuvo la puntuación más alta (79.73 ± 23.26). La calidad de vida de los pacientes con trasplante hepático se relaciona con la posibilidad de un buen estado de salud sin importar el tiempo postrasplante, integrándose en sus áreas social, laboral y familiar con independencia física, realizando actividades que les permitan recrearse y trabajar (Mendoza-Sánchez, y otros, 2016, pág. 180).
En cuanto a trasplantados por Cirrosis
Todos los reportes indican mejoría inmediata en la calidad de vida del trasplantado, incluida la condición de salud y los ámbitos social y psicológico. La incorporación inmediata a la vida productiva es fundamental, no sólo como soporte económico, sino también como estímulo psicológico de pertenencia a una sociedad y una familia. De ahí la importancia indiscutible que tiene para este tipo de pacientes el pertenecer a un grupo de apoyo como Alcohólicos Anónimos, para evitar recaídas en el consumo de alcohol y situaciones que ocasionen la reincidencia; con estas precauciones el paciente atenderá con mejor disposición las indicaciones médicas (Salinas & Tovar, 2007, pág. 227).
Conclusiones
Los trasplantes de hígado o hepáticos se realizan cuando hay una falla hepática que impide que el hígado cumpla sus funciones dentro del cuerpo humano como: crear proteínas y otras sustancias para el cuerpo, eliminar productos de desecho y toxinas de la sangre, metabolizar fármacos y almacenar energía.
Una falla hepática se puede presentar por la ingesta excesiva de bebidas alcohólicas, o lo que se puede denominar personas alcohólicas, las cuales en la mayoría de los casos se les desarrolla una cirrosis hepática, por lo que su tratamiento es un trasplante de hígado.
La calidad de vida de un paciente trasplantado en la mayoría de los casos va a depender de la edad del paciente, la mayoría de los estudios indican que un alto porcentaje regresa a una normalidad en su vida, en todos los aspectos, aun cuando un trasplante puede generar oros padecimientos.
En los casos de los trasplantados por cirrosis hepática, que en su mayoría suelen ser personas de gran edad, su calidad de vida debe ir acompañada de ayuda psicológica y de organismos que atienden casos de alcoholismo, esto con el fin de evitar recaídas en el consumo de alcohol. En cuanto a la calidad de vida en algunos casos la reinserción laboral por temas de edad es baja.
La calidad de vida también está asociada al éxito de la operación y la aceptación por parte del organismo del órgano trasplantado. Después de un trasplante en el proceso post operatorio y de recuperación suelen haber limitaciones físicas y de otras índoles por algunos meses, estas luego se van recuperando poco a poco hasta llegar al restablecimiento total de la persona.
Bibliografía
Camacho, V. A., Andrade, A., & de Valderrama, B. (2007). Calidad de vida en pacientes con trasplante de hígado. Universitas Psychologica, 6(2), 383-397.
García, P. (2018). PACIENTE TRASPLANTADO DE HÍGADO. Madrid, España: OMC.
La Revista de la American Medical Association. (2012). Trasplante de hígado. JAMA, 307(3), 320.
Mendes, A. M., & Bousso, R. (2009). No pudiendo vivir como antes: la dinámica familiar durante la experiencia de trasplante de hígado en niños. Revista Latino-Americana de Enfermagem, 17(1), 74-80.
Mendes, K. D., & Galvão, C. (2008). Transplante de hígado: evidencias para el cuidado de enfermería. Revista Latino-Americana de Enfermagem, 16(5), 915-922.
Mendoza-Sánchez, F., Ramírez-González, L., Reyes-Cruz, A., González-Ojeda, A., Hernández-Machuca, J., & Fuentes-Orozco, C. (2016). Evaluación de la calidad de vida en pacientes con trasplante hepático. Revista Médica del Instituto Mexicano del Seguro Social, 54(2), 176-181.
Salinas, J. G., & Tovar, L. (2007). Trasplante de hígado en pacientes con cirrosis hepática alcohólica. Medicina Interna de México, 23(3), 224-228.
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