Intervenciones no farmacológicas como coadyuvantes para prevenir o tratar el dolor neonatal

Resumen

Se ha demostrado que la capacidad de transmisión de estímulos dolorosos está presente desde las 26 semanas de edad gestacional, y los mecanismos que inhiben la transmisión de los estímulos dolorosos son inmaduros en el nacimiento, por lo que los recién nacidos tienen un menor umbral del dolor y como consecuencia presentan una hipersensibilidad a los procedimientos dolorosos. La metodología utilizada para el presente trabajo de investigación, se enmarca dentro de una revisión bibliográfica de tipo documental, ya que nos vamos a ocupar de temas planteados a nivel teórico como es Intervenciones no farmacológicas como coadyuvantes para prevenir o tratar el dolor neonatal. La técnica para la recolección de datos está constituida por materiales electrónicos, estos últimos como Google Académico, PubMed, entre otros, apoyándose para ello en el uso de descriptores en ciencias de la salud o terminología MESH. La información aquí obtenida será revisada para su posterior análisis. Hay evidencia comprobada que tanto en los neonatos prematuros y no prematuros, hay presencia de dolor por el cambio brusco que experimentan, al dejar de estar dentro del vientre protector de la madre y enfrentarse al mundo exterior. Hay que aclarar que estas no son solo consecuencias del dolor, el neonato puede nacer con enfermedades que también les pueden producir dolor, es por ello que debe haber un equipo especializado para afrontar estas situaciones, ya que el dolor puede ser causante de otras afecciones como estrés, debilitación del sistema inmunológico, aumento de la frecuencia cardiaca, frecuencia respiratoria, presión arterial, disminución de la saturación de oxígeno, entre otros. En los últimos años se han desarrollado estrategias para disminuir el dolor de una manera no invasiva, salvo en los casos que se tengan que administrar fármacos, ya que la farmacología puede generar más dolor y molestias a los neonatos, por el hecho de colocar sondas, catéteres, punción para extraer sangre. Es por ello que la musicoterapia, lactancia materna, succión no nutritiva, sacarosa, son alternativas muy viables y aconsejables como analgesia natural para el control del dolor.