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RECIMUNDO VOL. 9 N° ESPECIAL (2025)
En relación a la evaluación del abandono en
entornos físicos en la muestra de 51 adultos
mayores encuestados, se destacan diver-
sas situaciones. El 94.12% (48) de los en-
cuestados, indica que el abandono ocurrió
en su propia casa, mientras que el 3.92%
(2) de los participantes informa haber expe-
rimentado abandono en un hospital y adi-
cionalmente, el 1.96% (1) menciona haber
experimentado abandono en un terminal.
Estos resultados resaltan la importancia de
considerar los diferentes contextos en los
cuales se puede experimentar el abando-
no, ya que esto puede tener implicaciones
significativas para la salud y el bienestar de
los participantes.
Discusión
En el análisis del abandono activo, la per-
sistencia del abandono durante períodos
prolongados, como más de un año, sugie-
re un patrón que trasciende los incidentes
aislados. La totalidad de los participantes
informó haber experimentado algún tipo de
abandono en sus hogares, y el 66.67% ma-
nifestó sentirse solo en sus hogares, ya sea
por menos de una semana, entre una sema-
na y un mes, más de un mes o más de un
año. Esta cifra sugiere una prevalencia sig-
nificativa de situaciones de abandono den-
tro de la muestra estudiada. Este hallazgo
se alinea con la investigación de Balladares
et al. (2021) que también destaca la persis-
tencia del abandono en el tiempo como un
patrón importante que merece atención.
La identificación de la persona encargada de
los cuidados necesarios proporciona informa-
ción valiosa sobre el apoyo directo que recibe
el adulto mayor. El 49.02% de los participan-
tes identificaron a sus hijos como los principa-
les encargados de proporcionar los cuidados
necesarios, mientras que el 25.49% indicó
que nadie se ocupa de estos cuidados. Este
resultado coincide con la investigación de
McLean-Rodríguez et al. (2019), que encon-
tró una falta de designación de cuidadores
en algunos casos, lo que puede contribuir al
abandono de los adultos mayores. Explorar
las razones detrás de esta falta de designa-
ción de cuidadores y desarrollar estrategias
para establecer un sistema de apoyo más só-
lido son aspectos cruciales, respaldados por
la investigación de Xie et al. (2021).
Desde la perspectiva del abandono pasivo,
la falta de participación en actividades gru-
pales y recreativas puede ser un indicador
significativo, el 62.75% de los encuestados
no participa en ninguna actividad social, lo
que podría indicar un alto nivel de aislamien-
to social. Este hallazgo concuerda con los
resultados de estudios anteriores Asiú et al.
(2021), que sugieren que la falta de partici-
pación en actividades grupales y recreativas
puede estar asociada con un mayor riesgo
de abandono y aislamiento en los adultos
mayores. La ausencia de dicha interacción
puede llevar al aislamiento, y un trabajador
social puede abordar esto facilitando opor-
tunidades para la participación en clubes de
adultos mayores u otras actividades que fo-
menten la socialización y la conexión.
Adicionalmente, la evaluación del abandono
en diferentes entornos físicos también refleja
el abandono pasivo, el 94.12% de los par-
ticipantes informaron haber experimentado
abandono en su propia casa, lo que desta-
ca la importancia de considerar el contexto
físico en el que ocurre el abandono. Este
resultado está en línea con la investigación
de Figueiredo et al. (2018), que también su-
braya la relevancia de evaluar el abandono
en diferentes entornos físicos para com-
prender completamente las experiencias de
los adultos mayores. Sentirse abandonado
en dichos entornos puede indicar una falta
de apoyo emocional y social, agravando la
salud emocional y física del adulto mayor.
Como profesionales se debe explorar estas
experiencias subjetivas y diseñar estrategias
para fortalecer las conexiones sociales y
emocionales del adulto mayor que son esen-
ciales (Figueiredo et al., 2018).
La duración del abandono a lo largo del
tiempo también refleja las dinámicas fami-
liares. Si el abandono persiste durante lar-
CAMINO ACOSTA, S. A., QUILUMBA TUMBACO, M. P., LARCO CALISPA, M. J., & SALAZAR CHANGOLUISA, I. E.