María Lucrecia Casanova Intriago a; Shirley Bethzabe Guamán Espinoza b; Gustavo
Rodolfo Aragundi Intriago c; Daniela
Patricia De La Fuente Barahona d
Pautas de Seguridad alimentaria
para
padres con
niños con malnutrición y
discapacidad neurológica
Food Safety guidelines
for parents with children
with
malnutrition and neurological disability
Revista Científica
Mundo de la Investigación
y el Conocimiento.
Vol. 3 núm.3, septiembre,
ISSN: 2588-073X, 2019,
pp.
1554-1571
DOI: 10.26820/recimundo/3.(3).septiembre.2019.1554-1571
URL: http://recimundo.com/index.php/es/article/view/645
Código UNESCO: 3205 Medicina Interna
Tipo de Investigación: Artículo
de Revisión
Editorial Saberes del
Conocimiento
Recibido: 15/05/2019 Aceptado:
23/06/2019 Publicado: 30/09/2019
Correspondencia: theozamcasa@live.com
a. Doctora en Nutrición y Dietética; Nutricionista Clínica del Hospital General Chone; theozamcasa@live.com
b. Doctor
en
Medicina
y
Cirugía,
Magister
en
Nutrición; Docente
de la Universidad
Técnica de
Manabí;
c. Médico Cirujano; Universidad Técnica de Manabí; gustavoaragundi@gmail.com d. Médico; Universidad de Guayaquil; daniedelaf@gmail.com
RESUMEN
Hay
un creciente interés internacional en los vínculos entre la desnutrición y la discapacidad principalmente en niños, ambos son
los principales problemas de salud pública mundial, ambos
son importantes problemas de derechos humanos, y ambos son actualmente destacado dentro de
la agenda sanitaria mundial. En esta revisión, las interacciones entre los dos campos se exploran y se
argumenta que el fortalecimiento de los vínculos daría lugar a importantes beneficios mutuos y
sinergias. En numerosos puntos a
lo largo del ciclo de
vida, la desnutrición puede causar o
contribuir a la discapacidad de
una persona física, sensorial, intelectual o mental de la salud. Al
trabajar más estrechamente juntos, estos problemas se pueden transformar en oportunidades: servicios de nutrición y programas para niños
pueden actuar como puntos de entrada a la dirección
y,
en algunos casos, evitar o mitigar
la discapacidad; programas de
discapacidad
pueden mejorar
la nutrición de los niños. Para que esto suceda, sin embargo, son necesarios el compromiso político
y los recursos, así como los
mejores datos.
Palabras Claves: Desnutrición, Discapacidad, Nutrición, Salud infantil, Derechos
humanos,
Salud
pública, Salud mundial.
ABSTRACT
There is a growing international interest in the links between malnutrition and disability mainly in children, both are the main global public health problems, both are important human rights issues,
and
both are currently highlighted within the global health agenda. In this review, the interactions between the two fields are explored and it is argued that strengthening ties would result in significant mutual benefits and synergies. At numerous points throughout
the life cycle, malnutrition can cause or contribute to the disability of a
physical, sensory, intellectual
or mental health person. By working more closely together, these problems can be transformed into
opportunities: nutrition services and children's programs can act as entry points to the address and,
in some cases, prevent or mitigate disability; Disability programs can improve children's nutrition. For this to happen, however, political commitment and resources are needed, as well as the best
data.
Key Words:
Malnutrition, Disability, Nutrition, Child Health, Human Rights, Public Health, World Health.
Introducción.
Hasta hace poco, la política, la gestión del programa y
'mundos' profesionales de la
desnutrición y la discapacidad han
ido en gran parte por separado. Hay, sin embargo, un creciente
interés internacional
en los vínculos entre los dos (Groce, Kerac, Farkas, Schultink, & Bieler,
2013). Compartir muchas características comunes, brinda
la esperanza de que los enlaces más
estrechos y relaciones sólidas de trabajo entre los dos campos
podrían dar lugar a importantes
sinergias y beneficios mutuos tanto para padres como a niños que padecen de estos 2 grandes problemas:
· Ambos campos frente a los problemas globales que afectan a un gran número de individuos a menudo vulnerables, incluidos niños: unos mil millones de niños
en el mundo sufren de malnutrición y alrededor de mil millones viven
con una discapacidad;5
· Ambos están relacionados con los derechos humanos fundamentales: el derecho a la
alimentación, un determinante clave del estado
nutricional, es articulado en la Declaración
Universal de los Derechos Humanos (artículo 25) 1948; la Observación General sobre el
derecho a
la alimentación menciona específicamente
la derechos de las personas con discapacidad tengan acceso físico
a una alimentación adecuada
(Naciones Unidas., 1999) el derecho de todos los niños a una nutrición adecuada se establece en la Convención sobre los Derechos del Niño,
que ha sido ratificado por todos los países excepto dos para el cuidado de la salud, la educación
y la participación social se articulan en la
Convención de la ONU sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPD) que ya ha sido
ratificado por
147 países en 2006 (United
Nations, 2006)
· Ambos son actualmente destacado dentro de la agenda sanitaria mundial: el primer Informe
Mundial sobre la discapacidad se publicaron conjuntamente en 2011 por la OMS y
el Banco Mundial (World
Health Organization and World Bank., 2011) intervenciones costo- efectivas para
combatir la malnutrición han sido recientemente alta iluminada
en
la Serie Nutrición The Lancet 2013 y
la ampliación de escala Nutrición (SUN), lanzado en 2010, es una nueva e importante movimiento en el abordaje de la malnutrición por 'personas que unen - de los gobiernos, la sociedad civil, las Naciones Unidas, donantes, empresas e
investigadores en
un esfuerzo colectivo
para mejorar la nutrición (Nutrition.,
2013)
En esta revisión narrativa, estos y otros vínculos críticos
entre la desnutrición y físicas, sensoriales (es decir, sordera, ceguera), intelectual y discapacidad de salud mental son explorados.
Al proporcionar un marco conceptual y la identificación de áreas clave en las que interactúan, se
espera
estimular el trabajo futuro y, una vez a la base de pruebas más grande comienza a generar, para
fomentar la futura revisión sistemática para
orientar la política y la práctica en la prevención
de estos problemas.
Metodología.
Para
el desarrollo de este proceso investigativo, se plantea como metodología
la encaminada
hacia una orientación científica
particular que se encuentra
determinada por
la necesidad de indagar en forma precisa y coherente una situación, en tal sentido (Davila, 2015) define la metodología “como aquellos pasos previos que
son seleccionados por el investigador para lograr
resultados favorables que
le ayuden a plantear
nuevas ideas”. (p.66)
Lo citado por el autor, lleva
a entender que el desarrollo de
la acción investigativa busca
simplemente coordinar acciones
enmarcadas en una
revisión bibliográfica con el fin de complementar ideas previas
relacionadas a las pautas de seguridad alimentaria en niños con malnutrición y discapacidades a través de una revisión de literatura, para así finalmente elaborar
un cuerpo de consideraciones generales que
ayuden a ampliar el interés
propuesto.
Tipo
de
Investigación.
Dentro de toda práctica investigativa, se precisan acciones
de carácter metodológico mediante
las cuales, se logra conocer y
proyectar los eventos posibles
que la determinan, así como las
características
que hacen del acto
científico un proceso interactivo ajustado a una realidad posible de ser interpretada. En este sentido, se
puede decir, que la presente investigación corresponde al
tipo
documental, definido
por Castro (2016), “se ocupa del estudio de problemas planteados a nivel teórico, la información requerida para abordarlos se encuentra básicamente en materiales impresos, audiovisuales y /o electrónicos”. (p.41).
En consideración a esta definición, la orientación metodológica
permitió la oportunidad de cumplir con una serie de actividades inherentes a la revisión y lectura de diversos documentos
donde se encontraron ideas explicitas relacionadas con los tópicos encargados de identificar a cada característica insertada
en
el estudio. Por
lo tanto, se
realizaron
continuas interpretaciones con el claro propósito de revisar aquellas apreciaciones o investigaciones propuestas por
diferentes investigadores relacionadas con el tema de interés, para luego dar la respectiva argumentación a
los planteamientos,
en función a las necesidades encontradas en
la indagación.
Fuentes Documentales.
El análisis correspondiente a las características que predomina en el tema seleccionado,
llevan a incluir
diferentes fuentes documentales encargadas de darle el respectivo apoyo y en ese sentido
cumplir con la valoración de los hechos a fin de generar
nuevos criterios que sirven de referencia
a otros procesos investigativos. Para (CASTRO, 2016) las fuentes documentales incorporadas en la investigación documental o bibliográfica, “representa
la suma de materiales sistemáticos que
son revisados en forma rigurosa y profunda para llegar a un análisis del fenómeno”.(p.41). Por lo
tanto, se procedió a cumplir
con
la realización de una
lectura previa determinada
para
encontrar aquellos aspectos estrechamente
vinculados con el tema, con el fin de explicar mediante un desarrollo las respectivas apreciaciones generales de importancia.
Técnicas para
la Recolección de la
Información
La conducción de la investigación para ser
realizada en función a
las particularidades que determinan a
los estudios documentales, tiene como fin el desarrollo de
un conjunto de acciones
encargadas de llevar a la selección de técnicas estrechamente vinculadas con las características del
estudio. En tal sentido, (Bolívar, 2015), refiere, que es “una técnica particular para aportar ayuda a los
procedimientos de
selección de las
ideas primarias y secundarias”. (p. 71).
Por
ello, se procedió a la utilización del subrayado, resúmenes, fichaje, como parte básica para la revisión y selección de los documentos que presentan el contenido teórico. Es decir, que
mediante la aplicación de
estas técnicas se
pudo llegar
a recoger
informaciones en cuanto a
la revisión bibliográfica de los diversos elementos encargados de orientar el proceso de investigación.
Tal
como lo expresa, (Bolívar, 2015)
“las técnicas documentales
proporcionan las herramientas
esenciales y determinantes para responder a los objetivos formulados y llegar a resultados efectivos” (p. 58). Es decir, para responder con eficiencia a
las necesidades investigativas, se
introdujeron como técnica de recolección el método inductivo, que hizo posible
llevar a cabo una valoración de los hechos de
forma particular para llegar a la
explicación desde una visión general.
Asimismo, se emplearon las técnicas de análisis de información para la realización de la investigación que
fue ejecutada
bajo la dinámica
de aplicar diversos elementos encargados de
determinar el camino a
recorrer por el estudio, según, (Bolívar,
2015) las técnicas de
procesamiento de
datos en los estudios documentales “son las encargadas de
ofrecer al
investigador la visión o pasos que debe cumplir durante
su ejercicio, cada una de ellas debe estar en correspondencia con el nivel a emplear” (p. 123). Esto indica, que para llevar a cabo el
procesamiento de los datos obtenidos una vez aplicado las técnicas seleccionadas, tales como:
fichas de resumen, textual, registros descriptivos entre otros, los mismos se
deben ajustar al nivel que
ha sido seleccionado.
Resultados.
La desnutrición
y la discapacidad
Los campos de la desnutrición y
la discapacidad están estrechamente relacionados
con una serie de puntos de convergencia. Los países con altos niveles de malnutrición y deficiencia de nutrientes también a menudo reportan mayores tasas de discapacidad y retraso en el desarrollo (Organization., 2011) Hay
varias zonas importantes de la superposición y la influencia: la
desnutrición puede causar o contribuir a una variedad de
diferentes discapacidades; las
discapacidades pueden
causar o contribuir a la
malnutrición.
Las
interacciones se producen durante toda la vida, durante el embarazo, la lactancia y la infancia, la adolescencia, la edad adulta y en la vejez. En este documento se centran principalmente
en
la desnutrición causante de discapacidad y
la discapacidad que causa o contribuyen a la
desnutrición, aunque también es importante reconocer
que el exceso de nutrición (obesidad) asociada a condiciones tales como la diabetes y los accidentes cerebrovasculares son también
causas cada vez más importantes de discapacidad,
sobre todo en grupos de mayor edad (Wagner
& Brath, 2012).
Causas
de la desnutrición y la contribución a la discapacidad
Esto puede ocurrir durante todo el ciclo de vida, los primeros efectos son los de la desnutrición materna
sobre
el feto en desarrollo. Estas oportunidades de vida a los beneficios futuros para la salud
y el desarrollo son particularmente importantes,
ya
que no todos los impactos adversos de la malnutrición precoz son reversibles.
La malnutrición materna
La malnutrición materna puede afectar el desarrollo del feto, causa
retraso en el crecimiento intrauterino y aumenta
el riesgo de que el bebé en desarrollo sufra de algunas anomalias. Los micronutrientes a menudo desempeñan funciones específicas en estos hechos. Por ejemplo, bajo
folato materno se asocia con un aumento
del riesgo de defectos del tubo neural, uno de los ejemplos más claros de micronutrientes específicos, a menudo graves y sin embargo en gran medida prevenibles para la discapacidad. Una revisión reciente concluyó que 'Si la fortificación de
alimentos ricos en ácido fólico se logra con una cobertura del 100% en la población, el número de defectos del tubo neural en países de bajos ingresos podría ser aproximadamente la mitad.'
(Blencowe,
Cousens, Modell, & Lawn, 2010) La vitamina D y el calcio
son otros micronutrientes implicados en la discapacidad.
La
deficiencia de ya sea durante el embarazo es un factor de riesgo de parto prematuro.
La nutrición y la discapacidad las cuales está asociada con numerosas complicaciones y
secuelas adversas a largo plazo incluyendo parálisis y
deterioros cognitivos, visuales, auditivos y cerebrales. La deficiencia de yodo es una causa importante de deterioro global de desarrollo cognitivo, siendo el más grave el problema si el déficit se produce durante el embarazo temprano. La deficiencia de hierro es también común y puede afectar a la estructura del cerebro del feto y de la función, lo que lleva a problemas cognitivos y de comportamiento. El momento de las cuestiones de déficit: modelos animales demuestran que la privación de hierro prenatal afecta la actividad, impulsividad y la cautela mientras limita total privación postnatal emocional de desarrollo y cognitivo (Walker, y otros, 2007)
También es una buena evidencia del efecto de la deficiencia de hierro sobre la discapacidad
neuro-humana. Unas notas de revisión del efecto del tratamiento
en las mejoras a
corto plazo
observadas en los lactantes de
hierro suplementado sugieren que los efectos adversos se pueden
evitar, invertir,
o ambos (Walker, y otros,
2007). Sin embargo, la revisión también advierte que el riesgo de discapacidad hierro asociado podría no revertir completamente a un nivel normal después de la
suplementación: 'los niños con anemia
son de desarrollo en situación de riesgo en el corto plazo y seguirá siendo así
en el largo
plazo a pesar de la
terapia de hierro.
Una combinación más general de la desnutrición macro y micronutrientes materna se asocia
con
discapacidades físicas
y neurológicas
/ cognitivas. Crecimiento sub-óptimo de la pelvis en las niñas es un resultado de una mala nutrición temprana y
un factor de riesgo para la desproporción céfalo-pélvica, una causa de parto obstruido, y de lesión
fetal y asfixia al nacer, ambos de los
cuales son las principales causas de la parálisis cerebral (Ezegwui,
Ikeako, &
Ogbuefi, 2012). Este
es
un problema particular en los países con pocos recursos, donde, además de las tasas más altas de desnutrición, también hay pobres servicios obstétricos y
neonatales y por lo tanto una mayor
probabilidad de dificultades perinatales que
resulta en problemas de carácter más permanente.
La evidencia de discapacidades neurológicas y cognitivas relacionadas con la desnutrición
proviene de estudios, tales como las derivadas de 'hambre holandesa' la Segunda
Guerra Mundial. Numerosos
estudios han seguido esta cohorte que
fueron expuestos a malnutri-ción en el útero.
Los
efectos a largo plazo incluyeron deterioro de la función cognitiva, el aumento de
la respuesta al estrés y un mayor riesgo de esquizofrenia. Los efectos físicos
de esta malnutrición en los primeros años de vida son indirectamente relacionados con la
discapacidad: la enfermedad coronaria y la diabetes son más comunes en los sobrevivientes de hambre holandés (Lutter & Lutter, 2012). Estos son factores de riesgo para el accidente cerebrovascular
que es una causa
importante de discapacidad en
la edad adulta bien reconocidos.
La nutrición y la discapacidad.
Una vez más, esto tiene implicaciones preocupantes para el accidente
cerebrovascular y la discapacidad de adultos y
pone de relieve la necesidad de abordar las causas fundamentales, así
como las consecuencias inmediatas de
la discapacidad.
Por último, la
importancia de la nutrición materna no termina con el nacimiento. La leche materna es importante para el desarrollo en general, y de nutrientes específicos como la vitamina B12 que desempeña un papel en el desarrollo del sistema nervioso.
Por ejemplo, La deficiencia de B12 comúnmente causada por la anemia perniciosa no tratada o una dieta vegetariana estricta) con
niveles bajos en consecuencia en la leche materna puede conducir a retraso en el desarrollo y
deterioro neurocognitivo del bebe.
En una revisión de 18 países
de bajos y medianos ingresos, los
niños que no fueron amamantados durante la infancia eran más propensos a tener
resultados
positivos a las edades de 2-4 años cuando se
seleccionaron por cualquier incapacidad usando la pantalla
de diez preguntas UNICEF, que investiga
sobre el habla, trastornos de la cognición, la
audición, la visión, el motor / físicos y
convulsiones (Gottlieb, Maenner, Cappa, & Durkin, 2009).
La nutrición infantil.
Los bebés y
los niños pequeños que están desnutridos según la definición de insuficiencia
ponderal (bajo peso para la edad) y retraso en el crecimiento (baja talla para la edad) también son más propensos a diagnostico positivo para
la discapacidad (Gottlieb, Maenner, Cappa, &
Durkin,
2009). Las deficiencias en macronutrientes y micronutrientes son los factores de riesgo de
discapacidad física, sensorial y
cognitiva. Por ejemplo, respecto a la discapacidad asociada con micronutrientes, cada año entre 250.000 y 500.000 niños se
quedan ciegos como consecuencia de
la deficiencia de vitamina A. Varias de las vitaminas del complejo B están
asociados con condiciones de discapacidad: la vitamina B1 (Tiamina) manifiestos de deficiencia como beriberi, cuyos síntomas incluyen polineuropatía en extremidad inferior; Vitamina B3 (Niacina) manifiestos
de deficiencia como pelagra cuyos efectos neurológicos incluyen confusión y agitación; Vitamina B6 (Piridoxina), la deficiencia es una causa rara pero bien reconocida de la epilepsia intratable. La deficiencia de yodo afecta el desarrollo cognitivo de los niños pequeños, los efectos en los niños
muy pequeños son los más graves y
a veces irreversibles. La deficiencia de hierro en niños se asocia con
la cognitiva, el aprendizaje y el deterioro del comportamiento (de Andraca, Castillo, & Walter, 1997).
La malnutrición de macronutrientes en la
infancia a menudo se manifiesta como bajo peso o pérdida de masa y también afecta la función del sistema inmunológico
y hace que un niño sea más
susceptible a la infección (Katona & Katona-Apte, 2008). Algunas infecciones, en particular, la
meningitis cuando son tratadas de forma incorrecta o tardía, como puede suceder a
menudo en entornos de escasos recursos, son las principales causas de discapacidad. Otra manifestación de la mala
nutrición es el retraso del crecimiento, que se define como la talla para la edad por debajo de
dos desviaciones estándar de la mediana. Es causada por una serie de factores determinantes de la nutrición relacionada a macro y
micronutrientes, y tiene un numero de impactos negativos sobre la pérdida de audición física y cognitiva
es
otra posible discapacidad
ligado a malnutrición. Se ha
encontrado que lactantes con
desnutrición leve son más
propensos a sufrir la pérdida auditiva que los niños que no están desnutridos, y el riesgo de pérdida auditiva se incrementa en los lactantes
con desnutrición severa a profunda.
La discapacidad que causan la desnutrición.
Con la proliferación de discapacidades asociadas a la nutrición descritos en la sección anterior, es poco comprensible
que en el pasado muchos programas se centraron en la prevención de
la discapacidad a través de la intervención nutricional. Mientras que esto siempre será
importante, también es importante
que
los programas futuros
reconocen
la causalidad en
la otra dirección: los
individuos que nacen con o adquieren una discapacidad a menudo
se enfrentan a problemas significativos
relacionados con
la nutrición.
Discapacidades
que colocan
a un
individuo en particular en alto riesgo de
deficiencia nutricional incluyen, anomalías craneofaciales, parálisis cerebral, el labio y / o paladar hendido y los muchos síndromes genéticos como el síndrome de Down y la secuencia de Pierre Robin que están asociadas con, por ejemplo, problemas de deglución.
Los padres, cuidadores y
proveedores de servicios pueden no tener conocimiento de cómo alimentar
a su
hijo con discapacidad de
manera efectiva
o de
la forma de enseñar al niño a alimentarse. Esto es especialmente importante para los
niños con condiciones tales como la parálisis cerebral que puede necesitar un asiento especial o posicionamiento a
controlar los espasmos musculares o para los niños con síndrome
de Down que están en mayor riesgo de asfixia
y neumonía. Los tiempos de comida pueden conducir a un aumento de los niveles de estrés para
el
cuidador y el niño, lo cual puede resultar en la ingesta de alimentos
insuficiente (Adams, y otros, 2012). Otra de las preocupaciones relacionadas con la alimentación inadecuada es el mayor riesgo de aspiración que puede causar neumonía y en última instancia ser mortal, especialmente en niños que son más vulnerables en
general.
Hay una suposición común que los niños
con discapacidades no crecen y prosperan como consecuencia
de su deterioro. Mientras que algunas condiciones son sin duda
asociado
con diferentes normas '' de crecimiento, también es importante reconocer comportamiento, sociales y
culturales. Estos pueden a veces totalmente, a veces parcialmente explicar la nutrición subóptima.
Por ejemplo, en algunas culturas, las madres de los recién
nacidos con una discapacidad
que pueden disuadir
de la lactancia materna, la seguridad de la familia y parteras que el niño va a morir de
todos modos o no
llevar una vida productiva. Esto se convierte en una profecía que se cumple ya que estos recién nacidos morirán
de hambre rápidamente. El
estigma discapacidad circundante puede
dar lugar a niños con discapacidades, están dando cantidades menores de
nutrientes o más pequeñas de alimentos,
o intencionalmente no ser alimentados en absoluto,
con los racionamientos
familiares de
que los recursos limitados deben dedicarse a los niños que tienen una oportunidad mayor de sobrevivir y contribuir a sostener el hogar. Este razonamiento no sólo es incorrecto, sino que
se niega a estos niños el
derecho a crecer y prosperar.
Las
prácticas de
alimentación son también motivo de preocupación. Los familiares pueden tratar
a un
niño con discapacidad como un bebé, sin dejar de
dar un líquido de sólo dieta, en la creencia
de que el niño no va a ser
capaz de tomar alimentos sólidos. Esto puede conducir a
la desnutrición severa y, en casos
extremos,
la muerte.
Los padres y
cuidadores pueden también asumir que un niño con una discapacidad no puede aprender y desarrollarse en la misma forma que otros niños, y
por lo tanto no se puede animar a
estos niños a alimentarse por sí mismos. Por lo tanto, los niños con discapacidades pueden confiar más
en miembros
de la familia para la alimentación, la colocación de severas limitaciones
de tiempo y cargas económicas sobre
los cuidadores y la
familia.
La carga de la alimentación
de los niños con discapacidad es también una cuestión
de género como la responsabilidad de
alimentar a estos niños recae sobre todo en los miembros
femeninos de la familia
quien debe equilibrar las necesidades de los niños con todas las demás tareas necesarias.
El resultado es
que el
niño puede recibir
menos comida, ya que es
mucho tiempo para alimentar
a un niño con bajo
tono muscular y la espasticidad y nadie en
el hogar
tiene el tiempo o la energía para proporcionar este tipo de alimentación. Este es un problema no sólo en el hogar. El internacional ONG Lumos en el Reino Unido informó recientemente de que, por falta de tiempo
y de trabajo, cuidadores de niños con discapacidad en las instituciones búlgaras fueron incapaces de
dedicar más de 2 minutos para
cada niño durante la hora
de las comidas, a pesar del hecho de que la
ayuda en
estos niños es necesaria con la alimentación y la
bebida (Lumos, 2013)
Salud y seguridad social
para mejorar la nutrición
de los niños pueden ser menos accesibles
a los más necesitados, como los niños con discapacidades, y
particularmente los que viven en la
pobreza o ubicaciones remotas. Los servicios de salud o de nutrición basados en la comunidad pueden ser accedidos
menos por los niños con discapacidades debido a
las dificultades asociadas con el logro de
ellos (transporte
inaccesible o caro), o una falta de comprensión por los nutricionistas y proveedores de servicios o familias y
cuidadores acerca de las intervenciones
apropiadas. Además, muchas campañas de nutrición infantil se ejecutan a través de las escuelas, y
los niños con discapacidad tienen menos probabilidades que los no discapacitados a asistir a la escuela en todas las edades. Este resultado en los niños con discapacidades no sólo la zaga de sus
pares en el nivel de instrucción, sino también que no se benefician de las iniciativas de nutrición basados en la escuela. En casos extremos, algunas familias o comunidades pueden colocar un estatus inferior en un niño con discapacidad y los servicios de nutrición y salud dar prioridad a sus hermanos no discapacitados. Los niños con discapacidades
también están representados
despojadamente en muchas instituciones y orfanatos, y estas instalaciones son a menudo pasados por alto en los programas de alimentación. Una
preocupación adicional es la frecuencia de mala calidad de
los alimentos en las instituciones. Mientras que preocupa a
todos los niños internados en
instituciones, los niños con discapacidades
pueden estar particularmente en
riesgo.
Por último, la discapacidad es a menudo visto como un tema especializado y
por lo tanto no
se incorpora en educación para los profesionales de la nutrición, la salud y el desarrollo infantil.
Formación inicial y continua de los profesionales en el cuidado de la salud, la nutrición y
el desarrollo de los vínculos entre la discapacidad y la nutrición aumentaría la conciencia de los requerimientos específicos de nutrición de los niños con discapacidades, y
ampliar los programas y las prácticas más inclusivas. A medida que los esfuerzos de nutrición se amplíen, las necesidades de los niños con discapacidades deben ser integrados para
asegurar que se les ofrecen las mismas
intervenciones
que
salvan vidas como otros niños.
La nutrición y
la discapacidad están íntimamente ligadas: la desnutrición puede causar o
contribuir directamente a la discapacidad y la discapacidad puede llevar a la desnutrición. Esto
tiene implicaciones intergeneracionales y del curso de vida. Aunque
los bebés y los niños
son especialmente vulnerables, los niños
mayores y adultos también están en riesgo, entre otras cosas porque
la desnutrición en los primeros años de
vida tiene efectos a
largo plazo. Los factores de
riesgo que conducen a la desnutrición y
la discapacidad son múltiples que abarcan y los factores
biológicos, físicos,
ambientales y sociales.
Similares preocupaciones rodean
las necesidades nutricionales de los adultos con
discapacidades. Cuando se
vive en hogares con familiares, en particular cuando
los recursos son escasos, la cantidad de alimentos nutritivos y agua proporcionada a ellos es a menudo limitada.
Las mujeres son por lo general las que se esperan para ayudar con la alimentación y
tienen que equilibrar esto con muchas otras demandas sobre
su tiempo. Cientos de miles de niños con discapacidad
viven en entornos institucionalizados en el que el acceso a una alimentación adecuada y nutritiva a menudo es aún más difícil y
el
personal tiene tiempo limitado y energía para ayudar en
la alimentación.
Es imperativo que la futura política de la nutrición y la programación, la salud materno- infantil, la política de la discapacidad y las iniciativas de
salud pública más amplios reconozcan y planifiquen
para
el
enlace de la desnutrición en la discapacidad. De este modo, muchos de
los problemas actuales pueden transformarse en oportunidades para beneficiar tanto a las áreas de
atención de la salud. Para que esto suceda, se necesitan recursos y se requiere la planificación de una acción eficaz. Esto tendría importantes beneficios de
dos vías: programas de discapacidad tienen un gran potencial para
servir como un punto de
entrada a los servicios de nutrición; del
mismo modo, los programas de nutrición tienen el potencial de actuar como puntos de
acceso a los servicios de discapacidad. Las intervenciones nutricionales para todos los niños y
adultos también se beneficiarán los niños y adultos con discapacidades. Con el fin de garantizar una
nutrición eficaz e inclusivo, especial atención
debe
ser prestada por
nutricionistas. Por
último, los niños con discapacidades también
deben ser
incluidos en las intervenciones
de seguridad alimentaria en general y
de tratamiento para asegurar que reciban el mejor acceso a la nutrición
como una cuestión de igualdad y los
derechos humanos básicos.
Conclusiones.
Mientras que algunas organizaciones internacionales, los políticos y otros miembros
de la comunidad internacional están empezando a reconocer la importancia de mejorar la vinculación
de la
nutrición y la discapacidad, todavía queda mucho por hacer. Como clave de los pasos hacia adelante,
se sugieren los siguientes:
La comunidad internacional - gobiernos, los políticos, los donantes y
los profesionales multi
y bilaterales deben asegurar el compromiso político y los recursos para hacer frente a la nutrición
y la discapacidad como
cuestiones
relacionadas.
Para
entender los vínculos entre la nutrición y la discapacidad, se necesitan mejores datos. Esto incluye datos desglosados para permitir la comparación entre los discapacitados y sus compañeros no discapacitados.
Los planes y políticas nacionales de nutrición deben ser explícitos acerca de los vínculos y las
interacciones relacionadas con la discapacidad.
Una oportunidad es durante
la puesta en marcha
de las próximas nuevas directrices de la OMS sobre la
gestión de la desnutrición aguda severa (SAM). Esta claridad, aunque
sea
brevemente, reconocen la
discapacidad
como una causa subyacente de la SAM que debe ser considerado y
tratado. Como esta orientación a nivel
internacional ha sido traducido y adaptado para su
uso nacional, es vital que los mensajes sobre la
discapacidad siguen siendo fuertes. Idealmente, las directrices nacionales SAM no sólo deben
mencionar la discapacidad, sino también proporcionar una
guía detalla específicamente a la discapacidad.
Hay una necesidad de mejorar el acceso a los servicios de nutrición para las madres
embarazadas y lactantes, incluidos
los discapacitados.
Ésta debería incluirse
en todos los esfuerzos de nutrición-intervención temprana, salud y
desarrollo; por ejemplo,
a principios de la detección de malnutrición deben adaptarse
para asegurarse de que es más accesible para los
niños con discapacidad y
sus familias que en la
actualidad el caso.
Los profesionales del desarrollo, así como los especialistas en atención de la salud y
la nutrición deben ser educados
en cómo
incluir a los niños y adultos con
discapacidades.
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