Abordaje multidisciplinario del cáncer de mama: desde la detección por imagen hasta la reconstrucción postmastectomia: manejo integral de imagenologia, cirugía plástica y ginecología

Resumen

El manejo del cáncer de mama ha evolucionado significativamente en la última década, transitando de enfoques terapéuticos estandarizados y a menudo mutilantes hacia una medicina de precisión centrada en la conservación oncológica, funcional y estética. Esta investigación se fundamenta en la premisa de que el éxito terapéutico y la optimización de la calidad de vida (QoL) dependen intrínsecamente de un Abordaje Multidisciplinario (MDA) rigurosamente protocolizado. El objetivo principal fue sintetizar la evidencia científica de alto impacto publicada entre 2020 y 2025 que, valida la gestión integral de la patología mamaria, destacando la interdependencia crítica entre la Imagenología, la Cirugía Oncológica/Ginecología y la Cirugía Plástica. La metodología empleada consistió en una revisión selectiva de guías de práctica clínica internacionales (principalmente NCCN 2025) y ensayos clínicos aleatorizados recientes. Los hallazgos confirman el papel central de la Imagenología avanzada, estableciendo la Tomosíntesis (mamografía 3D) y la Resonancia Magnética (RM) con contraste como herramientas cruciales, no solo para la detección precoz sino también para la estadificación prequirúrgica precisa. En el ámbito quirúrgico, la evidencia reciente respalda la desescalada axilar, tal como lo demuestra el ensayo clínico SOUND, sugiriendo que la omisión de la cirugía axilar no es inferior a la biopsia de ganglio centinela (BGC) en pacientes seleccionadas con cánceres pequeños y axila clínicamente negativa. Respecto a la fase reconstructiva, la necesidad de radioterapia adyuvante se identifica como el factor determinante en la elección de la técnica. El colgajo perforador epigástrico inferior profundo (DIEP) ha ganado reconocimiento como la opción preferida de reconstrucción autóloga debido a sus resultados estéticos superiores, durabilidad a largo plazo y mejor tolerancia a la radiación en comparación con las reconstrucciones basadas en implantes. La conclusión de este análisis subraya que el MDA es un factor pronóstico independiente, aumentando las tasas de supervivencia y mejorando significativamente la QoL al integrar el apoyo psicosocial y los resultados informados por los pacientes (PROs). La gestión integral requiere una trazabilidad estricta y una comunicación fluida entre todas las especialidades para garantizar que la desescalada quirúrgica sea segura y que la restauración física y psicológica sea completa.