Oxigenoterapia a alto flujo en COVID-19

Resumen

La situación más crítica de los pacientes infectados por COVID-19, es cuando se desarrolla insuficiencia respiratoria, es aquí donde se generan los mayores índices de mortalidad. Hay diferentes técnicas para la oxigenación de los pacientes, están los procedimientos no invasivos como la cánula nasal de alto flujo y la ventilación mecánica no invasiva, y los procedimientos contrarios como la intubación orotraqueal. Sin embargo, en el mundo medico sigue habiendo posiciones encontradas acerca de oxigenoterapia de alto flujo. La metodología de la investigación, es una revisión bibliográfica apoyada por medios electrónicos, como fuente primaria de la obtención de la información. Las conclusiones mas relevantes es que la oxigenación de alto flujo es mas recomendada en la hipoxia leve, ya que puede reducir los índices de mortalidad por medio de una mejor oxigenación y reducción del trabajo respiratorio, sin embargo, de no tener éxito, hay que proceder a la intubación. La bibliografía consultada infiere que los pacientes jóvenes tienen más altas posibilidades de recuperación por la oxigenación de alto flujo. La oxigenoterapia de alto flujo es riesgosa para el personal médico, ya que se pueden generar aerosoles como consecuencia de la tos del paciente que infieren una alta probabilidad de contagio, sin embargo, esta se puede reducir por el uso de mascarilla.