Evaluación y acreditación de la universidad ecuatoriana: desafíos y funciones

Resumen

La evaluación y acreditación de las universidades son fundamentales dado el impacto de estas en el desarrollo integral de los países. La acreditación es un proceso de reconocimiento de la calidad de programas e Instituciones de Educación Superior, que tiende a consolidarse en el mundo de manera autónoma y voluntaria. Para que la educación superior contribuya a identificar y solucionar los problemas de la sociedad, se requiere que sea pertinente y de calidad, es decir, que debe actuar con responsabilidad y compromiso en la creación, desarrollo y transmisión del conocimiento, en todas sus formas y, expresiones promoviendo su uso en todos los campos, enmarcándonos en el accionar de los cambios de las reformas en la enseñanza universitaria como respuesta a las nuevas necesidades sociales. En este sentido, la evaluación y acreditación juega un papel sumamente importante. El objetivo de la presente investigación se centra en plasmar las generalidades relacionadas con la evaluación y acreditación de la universidad ecuatoriana, con énfasis en su funcionalidad y desafíos. El enfoque metodológico de la investigación es una revisión bibliográfico – documental. Entre los aspectos funcionales del sistema de evaluación y acreditación de las IES en Ecuador, se encontraron el paso de un sistema cuantitativo a un sistema mixto, donde lo cualitativo cobra un valor importante, la conformación y fortalecimiento de los organismos involucrados en estos procesos, así como la creación de guías y manuales de procedimientos que permiten que el sistema se soporte en una estructura sólida. Asimismo, a pesar de que es un sistema reciente, su puesta en práctica durante estos años ha permitido que las universidades hayan tomado conciencia de la importancia de la autoevaluación, la evaluación externa y la acreditación de sus procesos. Ahora bien, en cuanto a los desafíos, uno de los principales, es la resistencia al cambio entre las instituciones educativas, lo cual plantea una barrera importante. A pesar de que un gran número de universidades han entendido la importancia de mejorar la calidad, muchas de ellas han establecido tradiciones y prácticas que pueden no alinearse con las demandas cambiantes del proceso de acreditación.